Algunos vecinos aledaños al parque San Rafael afirman estar a favor de la construcción del vaso regulador que quieren llevar a cabo en el lugar.
Al unísono de "Sí queremos la construcción del vaso regulador en el parque San Rafael" los habitantes de la colonia aseguraron que desde hace años, al menos 36 cuadras sufren inundaciones. Por eso al ver el proyecto que presentó el Siapa lo consideraron necesario.
Asimismo mencionaron, que tras la suspensión de la construcción hace seis años el terreno modificado ha quedado abandonado, lo que provocó un punto de reunión para supuestos delincuentes. Además, el almacenamiento de agua en la fosa que se cavó ocasiona la gestión de mosquitos.
“Cuando nos dijeron que iban a hacer esta obra para quitar ese tipo de problemas, encantados veníamos veíamos y bien padre que todo se estaba arreglando. Pero resulta que no, que vecinos que no son de aquí que no pertenecen ni aledaños al parque San Rafael se están oponiendo a una obra. No los entendemos”, dijo Patty García, vecina del lugar.
La mujer agregó, que esta obra beneficiará a un aproximado de 36 a 40 manzanas que actualmente sufren de inundaciones.
Por su parte Hugo Manuel Cruz Cervantes, presidente de la liga infantil Bravos Guadalajara, señaló que los niños que juegan en los campos de béisbol en la unidad deportiva también han tenido afectaciones.
De acuerdo con el presidente, desde hace 24 años, ellos y algunos padres han padecido problemáticas, por eso estuvieron de acuerdo desde hace seis años con la implementación del vaso regulador ya que se prevé que en el sitio se construyan tres campos totalmente adecuados para el óptimo entrenamiento de los niños y adolescentes.
“Después de tres juntas de tres reuniones y tener ingenieros, vimos que la obra efectivamente tenía progreso y para que fuera provechoso para la gente de la comunidad”, dijo Hugo.
Los padres de familia y la liga de infantil de Bravos Guadalajara defienden este deporte y la importancia que han tenido los campos del parque San Rafael para el desarrollo de cientos de jóvenes durante más de dos décadas.
Los vecinos a favor del vaso regulador esperan que pronto se retomen las obras y la construcción de los campos para que la zona ya no represente un riesgo, al contrario, vuelva a tener vida con los torneos, las familias y los negocios de la zona.
MRG