Un total de 53 exhalaciones acompañadas por columnas de vapor de agua y diversas cantidades de gases y ceniza, conformaron la actividad registrada en el volcán Popocatépetl en un lapso de 24 horas.
De acuerdo con el reporte del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), los sistemas de monitoreo del coloso ubicado entre los estados de Puebla, Morelos y el Estado de México, se detectó actividad catalogada dentro del Semáforo de Alerta Volcánica Amarillo Fase 2.
Los escenarios previstos para esta fase contemplan que continúe la actividad explosiva de escala baja a intermedia; lluvias de ceniza leves a moderadas en poblaciones cercanas; y posibilidad de flujos piroclásticos y flujos de lodo de corto alcance.
“Se registraron 53 exhalaciones, acompañadas de vapor de agua, gases volcánicos y en ocasiones ligeras cantidades de ceniza”, detalla el informe.
El organismo dependiente de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) detalló que no se registraron minutos de tremor, es decir, de movimientos característicos por el paso de magma a varios kilómetros de profundidad.
El tremor es una señal sísmica continua y rítmica que generalmente precede o acompaña a las erupciones volcánicas y está asociado al movimiento de magma o de otros fluidos magmáticos al interior del conducto volcánico.
“Al momento de la elaboración de este reporte, se observa una ligera emisión de vapor de agua y gases con dirección oeste-noroeste”, añade el informe.
¿Qué hacer en caso de caída de ceniza en Puebla?
Ante la caída de ceniza, los integrantes del organismo dependiente de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) recomendaron: cubrir nariz y boca con pañuelo o cubreboca; limpiar ojos y garganta con agua pura; utilizar lentes de armazón y evitar los de contacto para reducir la irritación ocular; y cerrar ventanas o cubrirlas y permanecer lo más posible dentro de la casa.
El Cenapred reiteró la recomendación de no ascender al cráter del volcán, toda vez que existe la posibilidad de que ocurran explosiones, como se ha visto en varias ocasiones en el pasado, que implican la emisión de fragmentos incandescentes. En caso de lluvias fuertes, alejarse de los fondos de barrancas por el peligro de flujos de lodo y escombro.