En las últimas horas se informó acerca de la lamentable muerte de Waffle, la patita que acompañaba a sus dueños para vender agua embotellada por las calles de la colonia Centro y la colonia Doctores.
De acuerdo a sus dueños, el animal perdió la vida luego de que consumiera comida envenenada que le arrojó una persona en la calle, misma que hasta el momento no ha podido ser identificada, por lo que se encuentra libre.
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Tras este hecho, la familia ha estado desconsolada, sobre todo Cristian David, pequeño de 11 años que no se separaba de su mascota en ningún momento y que luego de la partida de su mascota no ha querido acompañar a su madre a vender.
“Destrozadísimo, muy destrozado, duró casi dos semanas en depresión, no quería hacer nada, quería estar dormido. No quería salir porque obviamente la gente, como ya nos conocía y todo, pues preguntaban por Waffle y para él era y sigue siendo un golpe muy fuerte”, comentó Karla Gómez, dueña de Waffle y madre de Cristian David.
¿Quién era Waffle, la patita chambeadora?
Como ya se mencionó, Waffle era una patita que acompañaba a sus dueños en su jornada laboral vendiendo agua embotellada en las calles del Centro Histórico de la Ciudad de México, misma que se hizo viral luego de que en redes sociales circularan videos del animal caminando con su cartel y sus peculiares zapatos.
Hace unos meses, en TELEDIARIO pudimos platicar con Cristian David, el pequeño de 11 años dueño de Waffle, y nos comentó cómo son las jornadas laborales con la patita.
“Las calcetas son para que no se queme las patitas, nos ayuda a vender aguas y camina atrás de nosotros”, comentó el niño.
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De acuerdo al pequeño, Waffle era la tercera mascota que tenía la familia, sin embargo, fue la primera que comenzó a acompañarlos a vender agua embotellada.
Usuarios en redes sociales se burlan de la muerte de Waffle
En las redes sociales, donde Waffle era muy conocida, los usuarios han comenzado a hacerle burla a la familia tras el anuncio de la muerte de la patita, algo que tiene muy triste a Karla, pues los comentarios lastiman a su hijo de 11 años.
“No faltan los comentarios tontos de la gente que le dice que si nos la comimos en diciembre y cosas así, A lo mejor y se le harán chistosas a esas personas, pero para nosotros que hicimos parte de nuestra familia a Waffle, es lo más hiriente que le pueden decir a un niño de 11 años”, comentó.
DR