Los Brooklyn Nets valen 3.500 millones de dólares. Gastan $180M anuales en su plantilla, más 98 en impuesto de lujo. Pero no funcionan. El despido de su entrenador Steve Nash y la suspensión a Irving por su apoyo a una película antisemita, últimos escándalos. Andrea Montolivo analiza la crisis desde Estados Unidos.
El 'tuit' de Irving con un enlace a una película antisemita en Amazon, publicado ante sus más de cuatro millones de seguidores, provocó escándalo en Estados Unidos. El jugador se negó a decir de forma clara y rotunda que está en contra del antisemitismo y los Nets decidieron el jueves suspenderle al menos cinco partidos, sin sueldo, hasta que cumpla con "una serie de medidas reparadoras que aborden el dañino impacto de su conducta".
Pero las consecuencias no solo afectan a la franquicia, sino también a sus millonarios contratos de patrocinio, a las empresas vinculadas con el equipo y a la NBA.
Reina el caos en Brooklyn y, apenas 24 horas antes, los Nets e Irving habían anunciado una donación de 500.000 dólares cada uno para apoyar entidades que trabajan para fomentar la inclusión.
La seis derrotas en ocho partidos y el despido del técnico Steve Nash son solo la punta del iceberg de una crisis que parece sin fin. El trío estelar formado por Durant, Irving y James Harden apenas coincidió 16 veces en la pista el año pasado. Ben Simmons, llegado el pasado febrero en un trueque con la 'Barba', cobra más de 35 millones por temporada y ha jugado seis partidos en ocho meses, sin conseguir aportaciones en dobles dígitos.
MN