Las Chivas del Guadalajara se alistan para su tercer Clásico Nacional en menos de dos semanas y tras quedar fuera de la Copa de Campeones de la Concacaf, todas sus aspiraciones están en la Liga, un hecho que destaca Edgar Chore Mejía.
El exjugador y entrenador platicó en exclusiva con TELEDIARIO sobre la actualidad del Rebaño en el Clausura 2024 bajo el mando de Fernando Gago, y, tras salir de Chivas femenil en 2021, detalló su preparación para volver a las riendas de un equipo, aunque apunta a la Primera División, pero no descarta regresar a la Liga MX Femenil.
- Club Guadalajara
Además, tocó el tema de las oportunidades para los entrenadores mexicanos en el futbol nacional, ante la ausencia de directores nacionales en el Clausura 2024.
¿Cómo valoras el desempeño de Chivas en este torneo?
Pienso que ha sido un camino en el que, como en cualquier proceso, comenzaron bien. Sin embargo, hubo situaciones en las que nos gustaría verlos con más consistencia y regularidad, pero al final, no soy ajeno. No puedo dar mi opinión como aficionado ni como entrenador, ya que sé que dirigir al club no es fácil.
También sé que, con respaldo y regularidad en los procesos, pueden capitalizar mejores resultados y volver esto más regular. Pero, por supuesto, conforme avanza el torneo y hay algunos resultados que no se dan, definitivamente quisiéramos que eso no sucediera, pero así es el fútbol.
¿Cuál es tu opinión sobre el funcionamiento general del equipo?
Estar en clubes grandes te coloca en el escaparate muy pronto. Los clásicos o una seguidilla de partidos, no lo llamaría presión. Digo, me formé en el club y me fue bastante bien, pero al final, hay cierto grado de expectativa muy grande porque para entrenadores, directivos y jugadores, sabes que te estás jugando todo.
Sin embargo, sé que están en buen momento para revertir, mejorar o afinar la manera en que se están desempeñando. Básicamente, eso se ha transmitido de generación en generación, y muchos jugadores que estuvieron en Chivas pueden constatarlo. Las indicaciones desde las fuerzas básicas hasta la Primera División son claras: en Chivas no se pueden perder dos partidos seguidos jamás. Parece algo simple, pero llevarlo a la realidad repercute en que la gente esté insatisfecha y como jugador, tampoco te sientes al 100%, aunque sepas que es parte de la competencia.
Todo parte de cómo uno toma las cosas para evitar este grado de cuestionamiento y mejorar la calidad en cómo enfrentamos el siguiente partido. ¿Cómo debemos salir? ¿Cuál debe ser nuestra actitud? Hay un montón de cuestionamientos más allá de lo táctico para mostrar otra cara desde el principio.
Con tu experiencia como exjugador de Chivas, ¿cuánto pesan las derrotas ante América?
Sí me tocó perder, pero la verdad creo que más veces gané que perdí. Al final, sí repercute. Como jugador, perder el clásico complica la semana, pero si ganas dos o tres partidos o sacas otros puntos, la perspectiva de la gente cambia.
Pero si atraviesas una etapa de empates y derrotas antes del clásico, este partido se convierte en un punto de inflexión tanto para los que llegan en condiciones no favorables como para los que llegan en condiciones extremadamente favorables, asumiendo que ganarán. A veces, eso se vuelve complicado. Es lo bonito del fútbol, pero también se polariza demasiado más allá del resultado, y al final, repercute para bien o para mal.
¿Cómo evalúas al América?
Al América lo veo muy equilibrado, han sido muy regulares. Es un equipo sólido que inicia con 11 jugadores, salen tres y entran otros tres con la misma identidad y hambre. Esto lo hace un equipo más maduro. Veo al América maduro, y aunque hablo desde los resultados, no es de gratis que estén consiguiendo buenos resultados. Han encontrado una buena idea de juego en poco tiempo.
Es criticable, si se quiere, pero al final es una idea de juego clara con la que se han mantenido y les ha funcionado.
¿Chivas podrá vencer al América este fin de semana?
Existe una posibilidad real, aunque el partido entre semana es complicado. Al final, debes salir a ganar, y el fin de semana, como jugador, me ha pasado muchas veces que llegas en mal estado y ganas, o viceversa.
Si me preguntas sobre la posibilidad, es del 100%. Analizando estadísticas, la tendencia indica menos probabilidad, pero honestamente, la probabilidad es 100% porque lo he vivido y sucede más de lo que la gente cree.
¿Qué tanto pesa la imagen de Javier Hernández en Chivas?
Alguien como él tiene un impacto directo en el desempeño de los compañeros. Su trayectoria es innegable, y cuando tienes compañeros con una trayectoria así, cambian tus hábitos y la manera de exigirte.
Sería tonto no fijarse en cómo entrena, come, vive y visualiza situaciones. Cuando éramos jugadores, llegaban nombres como Jared Borgetti o Aaron Galindo, y al final, eso se tiene que contagiar porque no es el máximo goleador de la selección de gratis.
¿Cómo se encuentra Edgar Mejía ante un posible regreso a los banquillos?
Esta es una de las primeras entrevistas que doy tras mi vuelta. Ya le puedo dar vuelta a la página a la situación personal que tenía. Ya he estado empezando a tener pláticas con algunos equipos, entre formales e informales. Simplemente no tengo prisa, pero sí, la verdad, me muero por volver a dirigir.
En su momento, muchos equipos me hablaron, pero no era el tiempo. No quería tomar ese tipo de responsabilidades sin tener plenamente mi cabeza metida en un equipo. Acá en Guadalajara tengo un par de negocios. Sigo estudiando y mi objetivo es ser el entrenador más preparado en México. Eso no garantiza éxitos, pero sí me acerca a lo que quiero. He tenido pláticas de ambos tipos, formales e informales.
La idea es empezar a perfilar mi carrera para la Primera División, lo que me tarde, por donde me tenga que pasar. Confío mucho en el entrenador mexicano. Hay muchos aspectos por los cuales también tiene que haber respaldo. Es como un actor de Hollywood.
Para cada papel, de repente tienen 8, 9, 10 maestros de diferentes acentos, de imagen corporal, desde mil cosas, y yo considero que un entrenador también no es solo entrenador porque tiene el título y sabe lo táctico, lo técnico y fundamentos. Debe haber más preparación, aparte de lo que significa ser un entrenador, porque es gestionar equipos, liderazgo, compromisos, etcétera. Así que me dediqué a seguirme formando.
¿Por qué no hay confianza hacia el entrenador mexicano?
He platicado con muchos directivos, empresarios y montón de gente, y a veces falta mucho, pero no por ser mexicano, tenemos el derecho a dirigir un equipo. Pienso que no nos pasa nada si vamos a tocar puertas, que para un actor es como ir a hacer una audición. Sí hay mucha queja y mucho todo, sí, pero qué hago yo para ganarme esa oportunidad.
Que, si es más complicado, definitivamente considero que hay muchos directivos que no confían en el entrenador mexicano y que se les hace más fácil votarlo a la primera a los dos, tres meses. Diría Hugo Sánchez que tiene más crédito por llamarlo de alguna manera, o sea, hasta de un año todavía, un año o cualquier entrenador, sea mexicano, gringo, peruano, español, un año es un año de trabajo y claro que debe de haber algo de diferente, a eso se llama continuidad.
Es difícil dar una opinión porque los que han tenido la oportunidad de repente los han cortado a los dos, tres meses. Pero el que dejaste 8 meses si funcionó, pero ese fue el uruguayo, el argentino, y no tengo nada en contra. El tema es que tienen que converger muchísimas cosas como para que realmente puedas tener éxito o en base, a qué vas a medir el éxito.
A que quedes campeón, a cuántos debutas, porque te dicen sí, nos interesa que salgan jóvenes, pero para la Jornada 4 la directiva está pensando en el campeonato, o sea, cómo se va a definir los objetivos yo creo que los que pueden tener lo mejor definido como estructura y como equipo son los que realmente se acercan al entrenador que sea que tenga éxito porque también han venido gente de renombre de entrenadores y no tienen éxito, o sea, pero no se les critica igual.
Yo estoy tocando puertas, pero tocar puertas se escucha mal. Todo es parte de la preparación, de la adaptabilidad, de que tanto estés abierto a sumar, porque al final del día en una organización es tan grande que uno no puede hacer todo solo y se necesita manos u ojos.
Creo que eso acerca más a un equipo a que tenga logros más regulares ya quitándole que a los logros son puros campeonatos, o sea, que claro toda la gente queremos campeonatos, pero esa es la consecuencia a todas las acciones anteriores.
IZN