El Monterrey volvió a quedarle mal a su afición, por sexta ocasión en la historia terminó perdiendo una Final cerrando como local y aunque en los últimos minutos le pusieron dramatismo, terminaron por sucumbir ante un América que con el empate 1-1, para un global de 3-2, logró el tricampeonato.
Rayados sólo se presentó en el juego más importante del año los últimos minutos, donde con gol de Johan Rojas al 85 empataron el marcador y estuvieron cerca de mandar el juego a los tiempos extras, pero ya no les alcanzó, teniendo que ver una vez más como un equipo visitante le daba la vuelta olímpica con el trofeo de campeón en su cancha. Tres veces lo sufrieron en el Tecnológico y ahora ya son tres en el Gigante de Acero.
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El primer aviso rayado fue a los tres minutos en un cabezazo de Brandon Vázquez que detuvo bien Malagón. América arrancó el partido aguantando la presión del Monterrey que tenía que buscar empatar el global.
Y si en la Ida fue la escuadra regia la que sufrió una dura baja en los primeros minutos, ahora le tocó a los de Coapa, pues apenas a los seis minutos Henry Martín pidió su cambio por una molestia muscular, de inmediato mandaron a calentar a Rodrigo Aguirre, quien fue abucheado por la afición rayada. Aunque pasaron los minutos y no hicieron el cambio.
A los 16’ una vez más el “Mochis” Cárdenas volvió a salvar a su equipo en un tiro de Zendejas dentro del área. Henry Martin marcó gol al 17’ en un remate de cabeza en tiro libre, pero fue anulado por un fuera de lugar muy apretado.
América fue avanzando poco a poco en la cancha y al 24’ Richard Sánchez, aprovechó un balón que le dejó Zendejas de cabeza y sacó un trallazo de larga distancia que se incrustó en el ángulo del arco albiazul para el 1-0 americanista, 3-1 en el global. Ahora Rayados necesitaba anotar dos goles y no recibir para obligar al alargue.
Malagón salvó su arco al 27’ en un disparo de Berterame, dejando ahogado el grito de gol en los más de 50 mil aficionados en el Gigante de Acero. Rayados estaba nublado, reclamaban todo al árbitro, eran superados ampliamente en el medio campo y hasta en la tribuna el aliento había decaído mucho.
Minutos antes de terminar la primera parte, Henry Martín ya no aguantó más y salió para dejarle su lugar al ex rayado Rodrigo Aguirre. Al término de los primeros 45 minutos, Monterrey se estaba muriendo de nada y América muy cerca del tricampeonato.
Demichelis mandó a la cancha a Sebastián Vegas y Johan Rojas para el segundo tiempo, sacando a Moreno y Aguirre. Al 48’ Malagón desvió un cabezazo de Stefan. El Gigante de Acero despertaba y alentaba a sus jugadores, mientras las Águilas aguantaban y esperaban un contragolpe.
Pasaban los minutos y la presión albiazul iba disminuyendo, América sabía que el reloj era otro aliado, con menos de 20 por jugar entraron el Tecatito y De la Rosa y de inmediato el ex Tuzo se hizo presente con un disparo peligroso, mientras que en la siguiente jugada Rodrigo Aguirre tuvo el gol en descolgada, pero falló.
Los intentos regios seguían, pero el América nunca le dio espacio a un jugador clave de Rayados, Sergio Canales, a quien nunca lo dejaron voltearse con balón controlado hacia el arco.
Sin embargo, al 85’ el español logró safarse la marca afuera del área, filtró un balón para la entrada de Johan Rojas quien se quitó a dos rivales y puso el 1-1 con disparo de derecha, para poner el global 3-2 en favor de las Águilas y necesitaban uno más para mandar a tiempos extras.
El Gigante de Acero despertó y empezó a empujar a su equipo por la hazaña. Y por poco lo logran al 88’ en un cabezazo de Sebastián Vegas que se estrelló en el travesaño. César Ramos dio seis minutos de reposición.
Al final ya no le alcanzó al Monterrey, el América terminó sacando todo a despejes largos, colgado del travesaño, pero todo valía por un tercer campeonato consecutivo, Rayados se tardó en llegar a la Final, no pudo darle a su afición el anhelado título en casa por vez primera en la historia y fracasó en el intento.
RJ