Un árbitro terminó en el hospital tras ser baleado mientras pitaba un partido de futbol amateur en la provincia de Tucumán, Argentina.
Óscar Antonio Pérez de 48 años de edad es el silbante que fue víctima de un par de disparos, cuando en el medio tiempo del partido se encontraba descansando en una mesa, cuando de pronto, un individuo comenzó a gritar su nombre desde las gradas, por lo que el silbante se levantó de su lugar y comenzó a intercambiar palabras con el ya mencionado, hasta que este sacó una pistola y le disparó.
Tras agredir al árbitro, el sujeto huyó en una motocicleta con rumbo desconocido y hasta el momento no ha podido ser detenido por la policía.
Por otra parte, Óscar Antonio fue trasladado a un hospital cercano al campo de futbol y ahí se pudo comprobar que este presenta una herida bala en la región dorso lumbar.
“Está en terapia para estar más controlado. Pero todavía se encuentra en riesgo. El señor está en constante evaluación y es atendido por personal del sanatorio del Parque”, dio a conocer Héctor Falcón, jefe de la Comisaría San José.
Por su parte, un testigo habló para medios locales, señalando que “en el lugar se encontraban los jugadores, que estaban por disputar el partido y el árbitro, con los asistentes de campo y el veedor. El referí estaba sentado en una mesa y se encontraba en la línea de la cancha lateral”.
En cuanto a los organizadores de la Liga, estos dejaron en claro que los lamentables hechos no tienen nada qué ver con el campeonato, deslindándose de cualquier responsabilidad sobre la agresión.
Fuera del trabajo arbitral, Óscar Antonio Pérez funge como jefe de seguridad del hospital en el que se encuentra internado, además de ser veedor de la Liga.