La madrugada de este martes, el mundo del fútbol regiomontano perdió a una de sus figuras de los años 70’s pues a la edad de 71 años, Alfredo “El Alacrán” Jimenez perdió la vida, dejando un legado imborrable en el balompié norteño al jugar para Rayados y para Tigres.
Oriundo de la Ciudad de México pero desde muy chico, él y su familia se trasladaron a Monterrey, convirtiéndose prácticamente en un regiomontano más, de ahí, su sueño de jugar en primera división era tan grande que lo consiguió para la edad de 19 años, donde los Rayados de Monterrey le abría las puertas en el maximo circuito.
Con la Pandilla destacó siendo un delantero letal, pues marcó más de 60 goles vistiendo la camiseta azul y blanco. El primer partido donde el ‘Alacrán’ se visitó de héroe, siendo apenas un joven desconocido ante la afición y la prensa de aquel entonces, fue en el América vs Rayados de la temporada 1970-71.
Las águilas vencían 1-0 a Rayados y la respuesta vino desde la banca, pues al minuto 65, Jimenez ingresó y marcó tres goles, en apenas su primera campaña como jugador profesional y derrotando al equipo más grande del fútbol mexicano en el majestuoso Estadio Azteca.
En Rayados estuvo hasta la 72-73, después pasó a Toluca para la 73-74 y volvió a jugar con Monterrey la 74-75. Ya era un goleador descomunal pero su intención era estampar su nombre en letras de oro en el fútbol regiomontano.
Llegó a Tigres para la Temporada 75-76, siendo nuevamente el goleador que se llevaba las portadas de los periódicos de ese entonces, además de conseguir un título de Copa. Fue un año muy bueno para Jiménez. Además de los 23 goles de Liga, anotó 10 de Copa y fue parte clave del título en dicho torneo ante América. Al final, ése sería el único campeonato que pudo conseguir en su carrera.
MN