La Fiscalía General del Estado ya tiene encima de su mesa tres denuncias contra el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por el beso en la boca que dio a la jugadora de la selección Jenni Hermoso durante la ceremonia de entrega de medallas del Mundial en Sídney.
Fuentes fiscales han informado a EFE de que el Ministerio Público ha recibido tres denuncias de particulares que solicitan investigar a Rubiales, cuya inhabilitación ha solicitado esta tarde La Liga Profesional de Fútbol Femenino de España (Liga F).
Una de ellas la presentó el presidente de la Escuela Nacional de Entrenadores de Fútbol en España (Cenafe), Miguel Galán, quien también se dirigió ante la Fiscalía de Madrid para denunciar el episodio, que está recibiendo un aluvión de críticas y peticiones de dimisión a Rubiales.
Al margen de la vía penal, el presidente de la Federación afronta dos denuncias ante el Consejo Superior de Deportes (CSD), dependiente del Ministerio de Cultura y Deporte: una presentada también por Galán y otra por Sumar, que solicita que Rubiales sea apartado de su cargo.
Por su parte, la jugadora Jenni Hermoso ha solicitado este miércoles la adopción de "medidas ejemplares" contra Rubiales a través de un comunicado difundido por el sindicato FUTPRO, que ha realizado también "un llamamiento" al Consejo Superior de Deportes para que, "dentro de sus competencias, apoye y promueva activamente la prevención e intervención ante el acoso o abuso sexual, el machismo y el sexismo".
Poco antes de conocerse la postura de Hermoso, el ministro de Cultura y Deporte en funciones, Miquel Iceta, advertía de que si la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no toma medidas, lo hará el Consejo Superior de Deportes.
La RFEF ha convocado con carácter de urgencia este viernes una Asamblea General Extraordinaria para tratar este asunto.
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