El delantero francés Kylian Mbappé cree que nunca va a poder digerir la derrota en la final del Mundial de Qatar, pero afirmó estar centrado en su club, el París Saint-Germain (PSG), y restó importancia a posibles polémicas por las celebraciones argentinas del título.
"Pienso que nunca va a digerirse. Ahora, como he dicho al entrenador y a los compañeros de equipo, no hay ninguna razón para que mi club pague un fracaso en la selección", dijo el futbolista a la prensa francesa tras el encuentro liguero disputado con el Estrasburgo.
En sus primeras declaraciones tras el retorno del Mundial, Mbappé admitió que los últimos días fueron difíciles, pero dijo que le "hace bien" volver a jugar a su club, fue, de hecho, clave para la victoria del PSG anoche (2-1)- y sentir el cariño de sus aficionados.
"He intentado volver con la mejor energía posible", aseguró.
Consultado sobre si había hablado con su compañero de equipo pero rival en la final, Lionel Messi, y por las celebraciones argentinas de la victoria, Mbappé rechazó sumarse a cualquier polémica.
"Hablé un poco con él tras el partido. Le felicité porque era la búsqueda de una vida para él. Para mí también, pero yo fallé y hay que ser siempre buen jugador. Las celebraciones no son mi problema. No hay que perder energía en cosas tan inútiles", aseveró.
París Saint Germain vence 2-1 al Racing de Estrasbourgo
El París SG, líder de la Ligue 1, sufrió más de lo previsto para imponerse al Estrasburgo (19º) por 2-1 gracias a un penal transformado en el descuento final por Kylian Mbappé, cuando el brasileño Neymar ya había sido expulsado, este miércoles en la decimosexta jornada del campeonato francés.
En el primer partido del PSG tras el Mundial, todo comenzó bien para el equipo de la capital, que en el minuto 14 se adelantó en el marcador después de que Marquinhos cabeceara una falta lateral lanzada por Neymar, pero el capitán parisino también fue protagonista del tanto del empate alsaciano, al desviar un centro desde la izquierda de Adrien Thomasson y sorprender a su arquero Gianluigi Donnarumma (51).
Todo se complicó para el PSG cuando 10 minutos más tarde se quedó en inferioridad tras la expulsión de Neymar. El delantero brasileño vio una tarjeta amarilla por soltar un manotazo a un rival y apenas dos minutos más tarde vio la segunda por simular un penal (62).
No fue hasta el descuento, cuando Kylian Mbappé ofreció el triunfo al líder de la Ligue 1 al transformar un penal (90+6), que con esta victoria suma 44 puntos, ocho más que el segundo, Lens, que el jueves visitará al Niza (9º).
MPP