Ni la Roma ni el Atalanta fueron capaces de sacar el partido del Olímpico adelante y firmaron un empate (1-1) insuficiente para sus aspiraciones europeas, en entredicho por la irregularidad de ambos conjuntos.
La igualada apunta como el resultado natural para dos equipos que no terminan de lograr dos victorias seguidas. El Atalanta, que tomó ventaja en la primera parte, recupera la sexta plaza, pero igualado con el Lazio, que aprieta desde atrás con una velocidad superior.
Fuera de la zona continental está el Roma, octavo, aunque a solo un punto de su rival. El conjunto de José Mourinho desperdició una buena ocasión de arrebatar a su adversario el puesto continental.
La Roma, que solo lleva un triunfo en cinco partidos, se encontró con el marcador en contra antes del minuto veinte cuando una carrera por la derecha del ruso Aleksey Miranchuk terminó con un centro que aprovechó, en la frontal del área pequeña, el neerlandés Teun Koopmeiners para batir a Rui Patricio.
Despertó con el golpe el equipo de Mourinho. Cada intento de Romelu Lukaku se topó con el meta Marco Carnesecchi, que sostuvo a su equipo muchos minutos. Respondió el Atalanta, más cómodo, que tuvo el segundo en las botas de Charles De Ketelaere y que frustró Rui Patricio.
La acción clave llegó poco después de la media hora, en el minuto 36, cuando la Roma tuvo la oportunidad más clara en las botas del neerlandés Rick Karsdorp, que, bajo palos, salvó el albanés Berat Djimsiti cuando entraba a portería. Pero Karsdorp, en su intento, fue golpeado por Matteo Ruggeri. El VAR lo vio, lo comprobó y lo sancionó. Penalti que transformó Paulo Dybala a seis minutos del descanso.
Perdió la continuidad el partido en la segunda parte, cuando las ocasiones fueron escasas. Los numerosos cambios y las interrupciones dejaron sin ritmo el choque. Dio la sensación de que el Roma arriesgaba más que el Atalanta. Carnesecchi se erigió en salvador de su equipo. Evitó un gol de Dean Huijsen y otro posterior de Dybala.
MPP