Lionel Scaloni, seleccionador de Argentina, expresó este martes, tras la clasificación para la final del Mundial 2022, que "no tiene ninguna duda" de que Lionel Messi "es el mejor de la historia", aseguró que es "emocionante" haber alcanzado el partido decisivo por el título y confirmó que su selección jugó "el partido que tenía que jugar" para vencer a Croacia.
"¿Si Messi es el más grande de la historia? A veces parece que somos argentinos y pecamos un poco de egoísmo porque es argentino es el mejor de la historia. Pero creo que no hay ninguna duda. Tengo el privilegio y estos jugadores de poder entrenarlos. Verlo es emocionante, porque cada vez que los ves genera algo a sus compañeros, a la gente y no sólo a los argentinos. Es una suerte y un privilegio que tenga puesta la celeste y blanca", destacó en la rueda de prensa en el estadio Lusail.
"Es algo muy emocionante haber clasificado para la final, pero todavía queda un paso. Es un momento para disfrutar todos, pero esto no se acabó y a pensar en lo que viene", dijo Scaloni, que no tiene preferencia por el adversario en la final, que saldrá del duelo de este miércoles entre Marruecos y Francia: "Nunca fui de buscar rival. El que toque. Los dos merecen estar ahí. Son dos grandes selecciones y estamos viendo quién es el rival".
"Estoy en la final y no me puedo comparar con ellos (Menotti, Bilardo y Sabella), porque son historia de la selección. Son gente que ha hecho grande esta camiseta. Me llena de orgullo poder dirigir una final y representar a la selección, pero no me pudo poner a la altura de gente que ha hecho historia en el mundo del fútbol. Ya con poder dirigir la final es un privilegio", abundó.
La afición argentina se echó a la calle para celebrar el pase a la final. "Intento no emocionarme. Es muy difícil. Yo creo que estoy en el lugar soñado para cualquier argentino y todos actuarían de la manera que lo hago yo. Cuando juegas para tu selección y representas a tu país es imposible no hacer lo que hacen estos chicos.
Es emocionante. Se puede ganar, se puede perder, pero es emocionante. La gente también. Va todo de la mano. En los momentos difíciles, cuando perdimos con Arabia, la gente estaba con nosotros. Sentimos su apoyo y eso es inigualable. Que festejen porque es un momento para festejar, porque Argentina está en el pedestal del fútbol y eso es para estar contento", explicó.
"Merecimos ganar, pero no sé si tan ampliamente. Ellos los primeros minutos manejaron la pelota. Sabíamos que podía pasar. Tiene tres volantes de primer nivel que juegan desde hace tres, cuatro o cinco años juntos, que se conocen muy bien. Son muy difíciles de marcar. La sensación era que tenían la pelota pero nosotros entendíamos que el partido había que jugarlo así. Es obvio que después se abre con el penal. Hicimos el partido que teníamos que hacer", valoró.
"Jugamos partidos mejores que este (en la era Scaloni). No tengo duda. El rival y la instancia hace que sea gigante. Pero creo que hemos jugador mejores partidos, de un nivel un poco más alto que este. Jugar contra este equipo no es fácil, por algo está donde está y por algo es el actual subcampeón del mundo", advirtió el técnico, que apuntó que "ganar siempre es bueno y antes de una final es el mejor descanso y el mejor remedio que puede haber", declaró.
Feliz porque hayan jugado ya los 23 futbolistas en este Mundial, algo que "es fundamental" para él, remarcó el "orgullo que es poder dirigir" a sus jugadores en la selección y dijo que Julián Álvarez hizo un partido "muy bueno, no sólo porque hizo dos goles, sino porque dio una mano bárbara en estos tres volantes que tienen ellos".
"Tiene un despliegue increíble, con la edad que tiene es normal que quiera comerse el mundo. Lo que le dices lo hace. Estamos contentos, sobre todo porque pudo plasmar en la red y eso está bien para un delantero", añadió.
Tras el tenso partido contra Países Bajos, Scaloni manejó los días previos "con una charla" con los jugadores. "Les dije que se despreocupen (de lo sucedido en cuartos de final), que habíamos hecho el partido que teníamos que hacer con Holanda. Lógicamente, había algunos matices que se tienen que corregir. No somos ni los buenos ni los malos de la película. Sabíamos que había que jugar una semifinal y si el partido se ponía bravo, como con Holanda, íbamos a jugarlo, no nos íbamos a achicar", aseguró.
Rja