David Alejandro Gómez Flores, atleta de judo proveniente de la Universidad de Guadalajara, murió el finalizar su competencia individual de más de 100 kilos durante la Universiada Nacional de Ciudad Juárez, Chihuahua.
El lamentable suceso fue informado por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, que en un comunicado, relató que el deportista falleció tras sufrir un paro cardiorrespiratorio.
Tras no presentar signos vitales, Gómez recibió RCP (reanimación cardiopulmonar) por parte del personal médico que laboraba en la sede de dichas competencias.
Posteriormente, fue trasladado en ambulancia al Centro Médico de Especialidades, donde fue ingresado al área de terapia intensiva.
En el hospital estuvieron presentes el cuerpo técnico de la Universidad de Guadalajara y el rector de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez.
La escuela chihuahuense lamentó el deceso del judoca y entabló comunicación con la familia y las autoridades de la Universidad de Guadalajara para expresarles solidaridad y atender todo lo relativo a ese fallecimiento.
Médico revela que fue una "muerte súbita"
Armando Tonatiuh Mondragón Rodríguez, médico especialista de los equipos deportivos de la UDG, explicó que el deceso de David Alejandro Gómez Flores fue una "muerte súbita".
“Se empezó a marear, a sentirse mal. Se sentó. Le dijo al árbitro que parara, quiso incorporarse nuevamente, no pudo, y ahí es cuando entramos nosotros y ahí cayó en paro. (…) No hubo un golpe, no hubo un evento que desencadenara eso”, explicó los hechos de esta tarde en un comunicado.
Sobre la atención ofrecida a David Alejandro, el médico mencionó: “Todos los médicos de los diferentes equipos colaboramos en la atención siguiendo todos los protocolos de reanimación”.
Dejó en claro que “el paciente llegó al hospital todavía con signos vitales, se siguieron dando maniobras en el hospital, los protocolos intra hospitalarios de reanimación cardiopulmonar y fallece minutos después.”
“En estos casos el desenlace es el mismo. Nosotros sabemos, como médicos, es que este tipo de cosas, incluso en un quirófano, no se pueden revertir.”
AM