Conseguir una tarjeta en la LPGA es el sueño de toda golfista profesional, el camino para llegar a ello requiere de muchos sacrificios, esfuerzos y dedicación. Una de las tantas cosas que tienen que hacer la jugadoras, es recorrer miles de kilómetros para poder participar en la gira de ascenso, la Epson Tour.
Para superar de la mejor forma estos grandes traslados, muchas de estas golfistas termina convirtiendo el coche en su propia casa, pues los trayectos entre un torneo y otro son muy largos. Nosotros nos subimos al coche de Fernanda Lira, para platicar un poco de su experiencia.
“Ahorita son 12 horas. Vamos a ver si las rompemos en dos días o nos las echamos todas hoy”, dijo antes de iniciar el viaje.
Para Fernanda, es importante que haya grandes atletas mexicanas que han sobresalido en la historia, pero considera que se debe ampliar el criterio y darse el tiempo de conocer a otras deportistas que también lo están haciendo bien.
“Los retos, además de Lorena Ochoa y Ana Guevara, que sobresalieron en sus disciplinas, son pocas las mujeres que han llegado y la verdad que eso es muy padre pero al mismo tiempo es un reto de que son una en un millón, porque no están viendo el trabajo y la dedicación de que puede haber muchas más que sobresalen”.
Uno de los consejos que Fernanda comparte, es siempre pelear por lo que uno quiere, sin importar las veces que uno tropiece, seguir insistiendo hasta conseguir el objetivo.
“El ‘no’ ya lo tenemos, entonces tú pregunta, siempre estando abierto a que te digan que ‘no’, pero si uno de de 5 te dice que sí, pues no perdemos nada, es el consejo que yo doy”.