Pareciera que está de moda dejar plantada a la gente en sus festejos de cumpleaños, pues en las últimas semanas se habían viralizado un par de casos. En esta ocasión, fue una niña coahuilense la que tuvo que sufrir este mal.
Este domingo, la pequeña Claudia celebraba su cuarto cumpleaños. Su madre le había conseguido un castillo inflable, más de 10 mesas, una piñata para los niños y un delicioso pastel. Sin embargo, conforme pasaba el tiempo, nadie llegaba a la cita. La razón: los invitados no quisieron perderse el Super Bowl.
Al ver la tristeza que tenía su hija, la madre no pudo retener las lágrimas. La tía de la pequeña decidió compartir las imágenes de la fiesta vacía en Facebook, e invitó a los saltillenses a unirse al festejo de Claudia.
Poco a poco, la gente comenzó a mandarle mensajes a la tía y fueron acercándose a la fiesta, algunos de los que llegaron lo hicieron con regalos y poco a poco, la fiesta se convirtió en lo que la pequeña Claudia esperaba.
La gente llevó muchos juguetes, botargas de “Bely y Beto”, show de payasos, y un club de motociclistas, quienes le dieron un pequeño paseo a la cumpleañera.
Al final del día, tanto la madre como la tía decidieron expresar su agradecimiento con la gente que se dio cita en la fiesta.