El Abierto de Los Cabos ya tiene un cuento de hadas para contar, aunque pudiera concluir en la segunda ronda. Alejandro Hernández aprovechó la invitación al cuadro principal y la suerte de enfrentar a un lucky loser para superar el debut y conseguir un triunfo nacional importante.
El primer set pudo haber caído para cualquier lado, a pesar de que la pizarra podría inferir que el colombiano fue claramente superior. Barrientos y Hernández entraron en un lapso de tres quiebres consecutivos, del cual salió airoso Nicolás. Tras ponerse 3-1 ya no soltó la ventaja y se adelantó en la pizarra 6-3.
La victoria parecía estar encaminada para el colombiano, ya que fue el primero en quebrar en el segundo set. El mexicano recuperó el quiebre inmediatamente y no se detuvo hasta que se llevó el segundo parcial por 6-4.
Alejandro y Nicolás protagonizaron un duelo de quiebres durante el set definitivo. La ventaja era para Barrientos luego de colocarse 3-1 arriba. Después el mexicano se llevó cuatro juegos consecutivos y se colocó con la posibilidad de sacar para el partido. Los nervios lo llevaron a desaprovechar un 30-15 y terminó cediendo el saque nuevamente.
Barrientos no pudo emparejar el partido y sacando 4-5, perdió nuevamente el saque y la victoria cayó del lado de Alejandro. Sus gritos se ahogaron con la algarabía del público, que celebró junto a él la primera victoria mexicana en individuales dentro del Abierto Los Cabos.
El “premio” para el mexicano será enfrentar al segundo favorito del torneo Felix Auger-Aliassime. Más allá de lo que ocurra en ese duelo, Alex terminó con una racha de 26 derrotas mexicanas en cuadros principales de la ATP y 49 derrotas de mexicanos ante jugadores extranjeros. De alguna forma u otra, ya está en la historia.
AM