Marina Stakusic fue la sorpresa del día al vencer por 6-3, 5-7 y 7-6 a la mejor rankeada y cabeza de serie Jelena Ostapenko, en un difícil partido que se extendió a casi tres horas.
La verduga de la letona jugará por primera vez unos cuartos de final en el circuito WTA, la última vez que llegó a dichas instancias fue en el mes de junio en el torneo de ITF en Ilkley, Inglaterra.
Las acciones primarias se vivieron de forma equitativa, ambas contendientes pelearon cada punto sin ceder ante una ventaja significativa. Ostapenko batalló con el saque y favoreció a la cuenta de su rival quien de a poco fue tomando terreno.
El esfuerzo exigió más en lo mental que en lo físico para la canadiense que supo aprovechar las fallas contrarias para irse arriba en el primer set.
Jelena interrumpió la seguidilla de cuatro games de la juvenil de 19 años para tomar la delantera en el segundo parcial, pero los errores no forzados continuaron siendo la “piedrita en el zapato” y cedió el empate a uno.
La rankeada número 12 no encontró el balance entre ritmo y potencia y regaló puntos entre doble faltas y pelotas pasadas de largo.
Marina por su parte se observó entera durante todo el compromiso, concentrada y enfocada mientras los nervios consumieron a su rival ante la falta de precisión.
Out tras out, fueron mermando los ánimos de Ostapenko y del publico asistente que no daba crédito a que la mejor tenista del certamen y una de las favoritas al título viviera una etapa tan fugaz en Guadalajara.
La experiencia de la letona salió a flote en seguida, forzó la definición del segundo parcial y a partir de entonces todo le salió bien
Se fue arriba 3-0 y cuando parecía que tenía el resultado en la bolsa volvieron a aparecer los errores y la canadiense sacó su mejor versión para reclamar el triunfo.
RJ