El Sillicon Valley Bank o Banco de Sillicon Valley fue un banco comercial con sede en Santa Clara, California, Estados Unidos, ahora mismo, la entidad financiera se encuentra en boca de todos tras ser protagonista de lo que algunos consideran como la mayor crisis financiera desde 2008.
Sillicon Valley Bank se encontraba en la lista de los bancos más grandes de la Unión Americana, específicamente en el decimocuarto puesto, y estaba enfocado a financiar a empresas de tecnología y atención médica o biotecnología, pero principalmente, a startups.
Este banco alcanzó su mayor superávit entre 2020 y 2021, cuando en el contexto de la pandemia de covid-19, surgían muchas empresas tecnológicas y del ámbito médico en el panorama internacional. Estas se apoyaron en Sillicon Valley Bank y depositaron sus utilidades en la entonces estrella del financiamiento de startups.
La liquidez del banco fue tal, que los depósitos a sus arcas sumaron 124 mil millones de dólares para marzo 2021, más del 100 por ciento respecto al año anterior.
Irónicamente fue esa gran liquidez la que encaminó a Sillicon Valley Bank ha tomar las decisiones que tiempo después lo llevaran a la quiebra. El banco optó por realizar grandes compras de bonos respaldados por el Gobierno de Estados Unidos, o bien, de bonos hipotecarios.
Estos productos generaban escasa rentabilidad, pero, pese a ello, en ese momento generaban más que cualquier préstamo que realizaran u otros productos que adquirieran a corto plazo.
El principal problema tenía origen en el largo periodo de tiempo que dicho capital iba a permanecer “atrapado” en la inversión de bonos, por lo que no podría circular ni ser retirado ante cualquier inconveniente.
La situación funcionaba ante los bajos tipos de interés, pero, llegó 2022 y el cambio en la política monetaria que ha encabezado la Reserva Federal de los Estados Unidos (FED), por lo que los tipos de interés volvieron a subir y de forma acelerada.
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Una subida de este tipo tiene dos efectos sobre el negocio tradicional de la banca. Por un lado, tiene que pagar más por los depósitos de sus clientes, pero va a ganar más con los ingresos procedentes de la financiación, ya que los préstamos son más caros.
Sin embargo, la situación de Sillicon Valley Bank era distinta, pues como se comentó, la entidad optó por invertir en bonos del Tesoro o bien en bonos hipotecarios, por lo que tendría que pagar más por los depósitos de sus clientes, mientras dichos bonos perdían valor.
Ante tal situación, el banco perdió entorno a 15 mil millones de dólares, según diferentes financieras y calificadoras.
Con este panorama, y ante el anuncio de los pasados días que hizo Sillicon Valley Bank, que dijo necesitar 2 mil 250 millones de dólares para seguir funcionando y cubrir sus pérdidas, los inversionistas rápidamente huyeron y provocaron la sentencia para el banco.
El Gobierno de Estados Unidos encabezado por Joe Biden reaccionó al colapso de la entidad financiera y aseguró a los inversores que se protegerá su dinero, además de que buscarán vender el banco, y, sobre todo, que no se realizará un rescate como el de 2008 con Lehman Brothers y otras entidades financieras.
Sillicon Valley Bank operaba 29 oficinas en los Estados Unidos y desde otros países como India, Reino Unido, Israel, Canadá, China, Alemania, Hong Kong, Irlanda, Dinamarca y Suecia.
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