Uno de los primeros almacenes dedicados a la venta al menudeo, Bed Bath & Beyond, solicitó protección tras declararse en bancarrota. Esto es consecuencia de años de bajas ventas, pérdidas y planes fallidos para cambiar la marca.
La cadena, dedicada a la venta de productos para el hogar, presentó su solicitud ante la Corte de Distrito de Nueva Jersey, Estados Unidos, a la que le indicó que, por el momento, sus tiendas y sitios web permanecerán abiertos. Además, estimó sus activos y cargas entre la franja de mil millones y 10 mil millones de dólares.
Sin embargo, dio a conocer que la decisión de declararse en quiebra la tomó después de no lograr reunir los fondos suficientes para mantenerse a flote.
La empresa, con sede en Union, Nueva Jersey, destacó a través de un comunicado que la declaración en quiebra la llevó a cabo de forma voluntaria y para realizar un cierre ordenado de sus negocios; mientras, indicó que seguirá con un proceso limitado de marketing para solicitar interés en una o más ventas de sus activos.
La compañía reveló que sus comercios y sitios web 360 Bed Bath & Beyond, así como 120 Buy Buy Baby seguirán abiertos y atenderán a los clientes mientras “comienza sus esfuerzos por efectuar el cierre de sus establecimientos minoristas”.
Adicionalmente, la empresa destacó que pretende cumplir con sus compromisos con sus clientes y socios. Esto luego de que detalló que garantizó un compromiso cercano a los 240 millones de dólares en financiamiento para Sixth Street Specialty Lending, Inc, esto con el objetivo de seguir operando durante el proceso de bancarrota.
¿Por qué se declara en bancarrota Bed Bath & Beyond?
El anuncio de la bancarrota llegó cuando las acciones de la empresa cayeron conforme aumentaba una especulación de bancarrota inminente. En números, su rendimiento económico también se vio afectado.
Específicamente, a finales de marzo, la empresa señaló que sus resultados preliminares mostraron una disminución de ventas entre 40 y 50 por ciento en las tiendas abiertas en menos de un año.
La compañía señaló en una declaración ante la Comisión de Bolsa y Valores a finales de marzo que planeaba vender 300 millones de dólares en acciones para evitar presentar la bancarrota.
No obstante, la tienda de productos para el hogar emitió varias advertencias de una posible bancarrota desde principios de año. A finales de enero, indicó en una presentación al gobierno que estaba incumpliendo con sus pagos de préstamos y no tenía los fondos para pagar lo que debía.
El impago estaba obligando a la compañía a considerar varias alternativas, incluida la reestructuración de su deuda en la corte de bancarrota.
KT