Enfermas y sin paga: abuelitas de Puebla, las encargadas de cuidar a sus nietos, revela Coneval

A pesar de contar con madre y padre o con solo alguna de estas figuras, las abuelitas cumplen el rol de cuidadoras en casi todo el estado, todo esto a pesar de padecer enfermedades y no recibir paga.

Una abuelita porta una corona de juegos infantil / Archivo Cuartoscuro
Puebla, México. /

Las abuelas maternas y paternas, seguidas por los hermanos menores a 15 años y los abuelos paternos, son las personas que más apoyan en el cuidado de menores de edad en viviendas de municipios del interior del estado de Puebla.

De acuerdo con el “Estudio cualitativo sobre pobreza y cuidado infantil en los hogares de México”, análisis desarrollado por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) que incluyó en la muestra a los municipios de Felipe Ángeles, Palmar de Bravo y Zacatlán, en el estado de Puebla, nueve de cada 10 hogares cuentan con apoyo para el cuidado de menores de 5 años.

El análisis revela que en la mayoría de los hogares el cuidado de los niños y niñas recae en las madres, sin embargo, en los hogares en los que solo está la madre o el padre de los menores, la participación de las abuelas es mayor.

Dentro de los hogares biparentales, es decir, en donde se detecta la presencia del padre y la madre, las redes de apoyo al cuidado de las hijas e hijos son las hermanas de la madre y su suegra, es decir, las abuelas paternas, quienes residen en otro hogar.

Enfermas o fatigadas: la labor de vigilar a menores mantiene agotadas a las cuidadoras en Puebla

Las personas cuidadoras reportaron buen estado de salud, aunque en varios casos las madres o abuelas que quedan a cargo de los menores señalaron encontrarse cansadas o haber experimentado fatiga con cierta frecuencia.

“Las personas cuidadoras presentaban algunos síntomas como dolores de cabeza, dolores de espalda o de alguna parte del cuerpo, o simplemente fatiga derivada del trabajo de cuidados a las niñas y niños menores de cinco años y a los otros miembros del hogar”, detalla el análisis.

En el caso particular de las abuelas que se encuentran en la red del cuidado de los menores de edad, reportan que padecen enfermedades como hipertensión, diabetes o alguna otra condición crónica.

En los municipios de Puebla que formaron parte del estudio del Coneval se identificaron redes de apoyo en el cuidado de menores que son un tejido en el que participan las personas, se interrelacionan, establecen nexos y formas de vincularse en las diferentes esferas de la vida social.

La red de apoyo consiste en vigilar a las y los niños cuando la madre sale a trabajar y hasta que regresa alguno de los padres. En parte de los hogares, se identificó la presencia incluso de la bisabuela, quien también participa en el cuidado de menores.

Cuidan a menores sin recibir un goce de sueldo por su labor

Tanto las bisabuelas como las abuelas participan del cuidado de las hijas e hijos. Las actividades principales de cuidado que realizan son: alimentación y vigilancia; además, se menciona que no hay necesidad de encargar a los menores con alguien externo al hogar, ya que siempre hay alguien en casa.

Las bisabuelas y las abuelas que participan en el cuidado de los menores se dedican al hogar y, en muchos casos, ambas son analfabetas. No hay ningún tipo de retribución a cambio de que se cuide a la niña o el niño, ya que el ejercicio se aprecia como normal.

Dentro de los municipios poblanos que formaron parte del estudio se identificó la presencia del abuelo, quien es considerado el jefe de familia y quien tampoco cuenta con algún nivel de escolaridad, por lo que se dedica a actividades agrícolas como jornalero; adicionalmente, aportan económicamente al hogar los tíos y el padre.

EG

  • Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de TELEDIARIO; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
LAS MÁS VISTAS