Una jueza de Nuevo México planea fallar el viernes sobre una solicitud para desestimar el único cargo contra Alec Baldwin por la muerte a tiros de una directora de fotografía, temiendo que el FBI haya dañado el arma de fuego durante pruebas forenses antes de que los abogados defensores pudieran examinarla.
Los abogados defensores del histrión pidieron a la jueza Mary Marlowe Sommer que desestimara el caso en su contra antes de un juicio de alto perfil que comenzaría en julio.
El equipo legal de Baldwin ha solicitado que, si el juicio sigue adelante, la jueza prohíba al menos la presentación de un análisis del arma utilizando piezas de repuesto por parte de un experto en armas de fuego para la acusación. Alegan que los investigadores podrían haber destruido pruebas potencialmente exculpatorias al comprobar si el arma podría dispararse accidentalmente sin apretar el gatillo.
¿Qué ocurrió en el set de filmación de ‘Rust’?
Durante un ensayo en el set de filmación el 21 de octubre de 2021, Baldwin estaba apuntando el arma a Halyna Hutchins cuando se disparó, matándola e hiriendo al director Joel Souza, quien sobrevivió. El famoso se declaró inocente de un cargo de homicidio involuntario, que conlleva una sentencia máxima de 18 meses de prisión.
Inicialmente, los investigadores del sheriff enviaron el revólver al FBI para una prueba de rutina, pero cuando un analista escuchó a Baldwin decir en una entrevista de ABC TV que nunca apretó el gatillo, la agencia informó a las autoridades locales que podrían realizar una prueba de descarga accidental, aunque podría dañar el arma.
Un equipo de investigadores ordenó al FBI que procediera y probara el revólver golpeándolo desde varios ángulos con un mazo de cuero crudo. Uno de esos golpes fracturó los mecanismos de disparo y seguro del arma.
"Entendieron que era una prueba potencialmente exculpatoria y la destruyeron de todos modos", dijo el abogado de Baldwin, John Bash, durante una audiencia virtual en la corte el lunes. "Es indignante y requiere desestimación".
Los fiscales dijeron que era "desafortunado" que el arma se rompiera, pero no fue destruida y las piezas aún están disponibles. Afirmaron que los abogados de Baldwin aún tienen la capacidad de defender a su cliente y cuestionar las pruebas en su contra.
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Los abogados del histrión alegan que las autoridades realizaron pruebas destructivas del arma sin molestarse en desmontarla y fotografiar las piezas primero, eliminando así la prueba más importante del caso. Tras observar daños en la muesca superior del percutor del revólver, instaron al juez a prohibir al jurado ver un análisis del arma reconstruida.