Dicen que “hombre prevenido vale por dos”, dicho que aplica con Pepe Aguilar, quien además de festejar el enlace matrimonial de su hija menor, Ángela Aguilar con el cantante de regional mexicano, Christian Nodal, tomó una serie de precauciones incluidas en un acuerdo prenupcial de millones de dólares.
De acuerdo con una versión que ha cobrado fuerza en los últimos días, el interprete de “Te fallé” fue condicionado por Pepe Aguilar para establecer y firmar una capitulación matrimonial, como legalmente se denomina a este tipo de acuerdos.
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A través de su canal de YouTube, el periodista de espectáculos, Michelle Rubalcava mostró imágenes del supuesto contrato en el que Nodal se compromete a que, de presentarse una infidelidad, deberá pagar a Ángela 12 millones de dólares para reparar el daño.
“Medios internacionales aseguran que Nodal fue obligado a casarse con Ángela Aguilar bajo contrato firmado por su suegro Pepe Aguilar, dicho contrato le exige a Nodal permanecer tres años junto a Ángela Aguilar sin haberle sido infiel, de lo contrario al comprobarse una infidelidad por parte de Nodal este deberá pagar la cuantiosa suma de 12 millones de dólares y el divorcio inmediato con Ángela Aguilar”, comentó Rubalcava.
¿Qué es un acuerdo prenupcial?
En México y otros países del mundo existen medidas legales para blindar a los recién casados en caso de que el matrimonio no funcione y el amor no sea suficiente, por lo que se establecen las capitulaciones matrimoniales.
Cuando una pareja decide casarse, lo primero que debe definir es bajó que régimen lo hará: sociedad conyugal o separación de bienes.
Definido este punto, ya pueden establecerse preacuerdos para definir las capitulaciones matrimoniales; en México el Artículo 179 del Código Civil Federal establece que las capitulaciones son “los pactos que los esposos celebran para construir la sociedad conyugal o separación de bienes y reglamentar la administración de estos en uno y otro caso”.
En este texto pueden poner clausulas especificas que deciden los novios de acuerdo con sus necesidades, entre ellas la de adulterio, hecho que en México ya no es un delito penal, únicamente es causal de divorcio desde marzo de 2011.
La infidelidad en una relación puede ser el final de la confianza mutua y a menudo lleva al final de una relación.
Hoy, muchas personas realizan acuerdos prenupciales y postnupciales para controlar como se dividirán los bienes y el dinero en caso de un divorcio, y muchos de estos acuerdos incluyen cláusulas que garantizan específicamente las consecuencias de una infidelidad.
La “Cláusula de Infidelidad” es el nombre que se le otorga a una cláusula en un acuerdo prenupcial o postnupcial que requiere a un cónyuge infiel pagar dinero adicional durante un divorcio.
Una cláusula de infidelidad es siempre opcional en un acuerdo prenupcial o postnupcial; sin embargo, las personas que saben que su cónyuge tiene un historial de infidelidad pueden beneficiarse grandemente de este tipo de cláusula.
A decir del despacho de abogados establecido en California, Bamieh & Smeth, este recurso asegura que, si el cónyuge es infiel, deberá pagar las penalidades contenidas en el acuerdo y sus pagos de sustento.
Esta cláusula también puede ayudar a prevenir la infidelidad. Si el cónyuge sabe que tendrá que pagar penalidades millonarias de ser sorprendido siendo infiel, podrían evitar incurrir en la misma.
KGA