Luego de la marcha de cientos de mujeres por el Día de la Mujer, la tarde noche del miércoles 8 de marzo en el Centro de Monterrey se ubicaron considerables daños materiales a negocios y más, lo cual reprochó el conductor de varios programas de entretenimiento, Ernesto Chavana.
A través de su Instagram, el conductor señaló que el Día Internacional de la Mujer se ha convertido en actos de violencia, sin respeto a la autoridad, monumentos, negocios e incluso para cualquier persona que transite mientras se da la marcha.
“El Día Internacional de la mujer se está convirtiendo lamentablemente en violencia, una cosa es el respeto que las mujeres buscan con estas manifestaciones y otra que sean ellas mismas las que no respeten la autoridad, los monumentos, negocios, personas que transitan y todo esto está grabado”.
Considera que debe haber castigos
De los lugares más afectados destacan el Palacio de Gobierno y la Explanada de los Héroes, el cual fue el punto de inicio y conclusión de la manifestación, los cuales presentaban pintas en prácticamente toda la fachada, mientras que algunas puertas y ventanas del recinto fueron incendiadas y los vidrios destruidos.
Chavana reiteró que fueron actos reprobables los cuales manchan la verdadera intención de la manifestación, por lo que consideró deben ser castigadas.
“No se respetan ni a ellas mismas, eso de incitar a las demás a que les griten a las policías con mensajes de odio, de quémenlas por traidoras, que tipo de manifestación es esa, es una muestra evidente que no saben cuál es el principal motivo de la marcha, estos actos reprobables manchan la verdadera intención del movimiento y deben ser castigados”.
Actos de violencia manchan la verdadera intención de la marcha, asegura Chavana
El influencer cuestionó cómo es posible que entre mujeres acepten este tipo de actos violentos, los cuales, consideró, no ayudan en la marcha y manchan el gran esfuerzo que hacen todas en ir.
"Creo que las mujeres que van con buenas intenciones a la marchan aceptan a ciertos grupos con otra intención, como no se dan cuenta, como no piden que se frenen esos actos violentos, que no ayudan a la marcha, es una tristeza, pena, después del esfuerzo de muchas, más por el mal recuerdo de los daños e intolerancia que se vive, deben pagar por los daños que cometen”.
Otra zona considerablemente afectada por el paso de la protesta fue el cruce de la avenida Zaragoza y Ocampo, donde se encuentra también el Palacio Municipal de Monterrey y el Museo de Arte Contemporáneo de Monterrey (MARCO).
En aquel punto, hubo igualmente vidrios destruidos y pintas en cualquier tipo de superficie; en muchas de estas consignas se hacía denuncia de violencia ejercida contra mujeres y se señalaban a los presuntos agresores.
Aunque el Museo MARCO tomó sus previsiones para intentar mitigar los daños a su edificio colocando mantas en una parte de su fachada, las manifestantes las retiraron e igualmente cubrieron de pintas una sección.
En tanto, la Catedral de Monterrey también padeció y presentó algunas pintas, aunque otro tipo de consecuencias fueron probablemente evitadas por un grupo de religiosos que se apostó afuera del recinto con mantas en su poder para contener los daños.
elmm