Una mujer de 22 años y su hermana de 9, fueron asesinadas por un hombre que está prófugo de la justicia en la provincia de Corrientes, Argentina. De acuerdo con la policía, la pareja de la mujer le había dado alojamiento al asesino porque era su amigo.
El doble homicidio ocurrió el martes 4 de junio, aproximadamente a las 18:30 horas, después de que Miguel Andrés Zárate, de 24 años, llegara a la casa donde estaban la menor y la joven. Fue ahí donde vio a su amigo saliendo corriendo de la finca.
Al ingresar a la casa, dio de inmediato con los cuerpos. Se trataba de su pareja de 22 años, Isondú Marisel Fernández y Aitana, de 9 años. La primera presentaba heridas en los brazos, probablemente realizadas con un machete, además de dos lesiones con arma blanca en el tórax. Mientras que la niña estaba en la cama, y estrangulada con un cinto.
¿Qué se sabe del asesinato?
De acuerdo con la Policía de Corrientes y con las indagatorias que compartió el fiscal subrogante Federico Rodríguez, la pequeña Aitana fue la primera en ser atacada.
Buenaventura Duarte, ministro de Seguridad de Corrientes, agregó que el principal sospechoso es el amigo de la pareja de Isondú Marisel, a quien había recibido en su hogar desde la ciudad de Curuzú Cuatiá.
Además, esta teoría se refuerza porque el hombre había acosado sexualmente a la pequeña Aitana, motivo por el cual lo enfrentó su hermana mayor. Ante esto, no se descarta que el homicidio de las dos haya ocurrido durante un intento de abuso, o que el sujeto haya asesinado a Isondú tras descubrir el cadáver de la menor.
¿Quién es el responsable?
El sospechoso ha sido identificado como Antonio Villalba, de 41 años, el cual aún sigue prófugo de la justicia y sin ser localizado.
Los perros de rastreo pudieron dar con su olor hasta la ruta provincial número 25, donde pudo haber abordado un coche que le permitió huir lo antes posible de la zona de Parada Acuña, en Argentina.
Migue Zárate, pareja de la víctima, queda descartado como sospechoso ya que el asesinato ocurrió entre las 16:00 a 18:00 horas, periodo que él usa para trasladarse hasta la vivienda, es decir, no estaba en el punto cuando fueron asesinadas las dos hermanas.
A parte de lo anterior, la policía mencionó que Villalba, el supuesto asesino, padecía de un trastorno mental aunque aparentaba no hacerlo. Sobre todo, era habitual verlo acompañar a la niña cuando esta realizaba compras.
Por último, se sabe que cerca de la casa encontraron un trozo de cable, con el cual presuntamente Villalba intentó quitarse la vida. En la escena del crimen encontraron tres celulares, un machete y un cuchillo, así como los zapatos de la pequeña Aitana manchados de sangre.
Con información del Clarín
MRG