Este lunes se reportó el bombardeo por parte de Rusia que ocasionó la destrucción de una torre de televisión en Járkov, Ucrania. Situación que, de acuerdo con las autoridades, generará un periodo difícil en el próximo mes.
Las fuerzas rusas reivindicaron la toma de un nuevo pueblo situado al suroeste de la ciudad de Donetsk, en el este del país, una nueva muestra de la creciente presión ejercida por Moscú en la exrepública soviética, invadida en febrero de 2022.
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La estructura de la torre de televisión, de 240 metros, se derrumbó a media altura, así lo constató un periodista de la Agence France-Presse (AFP). Posteriormente el gobernador regional Oleg Synegubov confirmó el ataque y aseguró que no hubo victimas gracias a que los empleados se escondieron durante la alerta.
"Los ocupantes atacaron una infraestructura de televisión en Járkov… Los empleados se escondieron durante la alerta. No hubo víctimas", señaló el gobernador y añadió también que se profujeron interrupciones en la señal televisiva.
La instalación ya había sufrido daños tras otro ataque ruso en marzo de 2022.
Imágenes difundidas en redes sociales y grabadas poco después del impacto muestran la parte superior del edificio caer en una nube de humo gris.
En febrero, Moscú logró hacerse con Avdiivka. Y hoy busca conquistar Chasiv Yar.
Jarkov ha sido atacada con frecuencia
La ciudad de Jarkov, donde vivían más de 1,4 millones de personas antes de la guerra y que está situada cerca de la frontera con Rusia, ha sido atacada con mayor frecuencia por las fuerzas rusas en las últimas semanas.
Sus infraestructuras energéticas también fueron atacadas, causando importantes cortes de energía a finales de marzo.
El presidente Volodimir Zelenski viajó a inicios de abril a las líneas defensivas recientemente cavadas en esta región, donde el frente se encuentra a unos 40 kilómetros de Jarkov.
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Rusia ha tomado Novomykhailivka
En el frente, donde las tropas rusas ganan terreno desde la caída de Avdiivka en febrero, Moscú reivindicó la toma del pueblo de Novomykhailivka, a unos 30 km de Donetsk.
El pueblo se sitúa cerca de Vugledar, una localidad en el cruce de los frentes sur y este que Rusia trata de conquistar desde hace dos años.
Varias localidades más cayeron en manos rusas en las últimas semanas, en un momento en que el ejército ucraniano se enfrenta a una escasez de municiones y de personal militar, y en que la ayuda militar occidental tarda en llegar.
La situación se mantiene complicada y no se pronostica algún cambio
El jefe de la inteligencia militar ucraniana, Kyrylo Budanov, consideró el lunes que la situación en el frente iba a empeorar hacia mediados de mayo y junio. Será un "periodo difícil" para Ucrania, insistió.
Kiev teme que se produzca una ofensiva rusa aún más potente. El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas ucranianas, Oleksandr Syrsky, advirtió a mediados de abril que la situación se había empeorado "considerablemente" en el frente este.
Biden promete a Zelenski enviar "rápidamente" ayuda militar
Estados Unidos actuará con rapidez para proporcionar ayuda militar a Ucrania para combatir la invasión rusa, dijo Joe Biden a Volodimir Zelenski en una llamada telefónica el lunes, según informó la Casa Blanca.
Biden subrayó el "compromiso duradero" de Estados Unidos con Ucrania y dijo que "proporcionará rápidamente nuevos e importantes paquetes de ayuda a la seguridad para satisfacer las urgentes necesidades de Ucrania en el campo de batalla y en defensa aérea" tan pronto como el Senado estadounidense apruebe el martes un paquete 61.000 millones de dólares.
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