El primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC), Raúl Castro, llamó a los principales dirigentes nacionales “a morir combatiendo”, en una reunión a puertas cerradas en La Habana en la que al parecer la tensa situación económica de la isla fue uno de los principales temas de debate.
Según reportes oficiales, en el intercambio con los jefes del PCC en todas las provincias y municipios del país, Castro dijo que levantar la economía debe ser “el frente principal de trabajo”, y en ese contexto evocó la dura crisis vivida aquí tras la desaparición del aliado soviético, en el decenio de los años 90 del siglo pasado.
Al remitirse a esa época, cuando los cortes de electricidad llegaron hasta las 16 horas diarias por no contarse con el petróleo soviético, Castro rememoró que esa crisis causó “manifestaciones de desaliento entre algunos dirigentes y subrayó que hay que morir combatiendo, hay que luchar siempre con la frente en alto, porque esa ha sido nuestra principal convicción”.
El informe oficial dejó entrever que el turismo internacional sigue siendo la principal carta del gobierno para hacer frente a la falta de liquidez que padece el país, pese a que tras la llegada al poder del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, Washington desestimuló los viajes de los estadunidenses, afectando una de las más dinámicas fuentes del sector turístico, y endureció el embargo de más de medio siglo al país caribeño.
“Durante casi tres horas, Raúl Castro compartió (también) algunas ideas acerca del tenso escenario internacional, marcado por conflictos en varias partes del mundo; la aplicación de las llamadas guerras no convencionales para derrocar gobiernos; la situación en América Latina; así como hechos históricos que marcaron a nuestro país, entre ellos el derrumbe del campo socialista” europeo, dijo el informe oficial sin dar más detalles.