Un cirujano de 52 años fue condenado después de que le recetó a una mujer diclofenaco en 2018, una medicina a la que era alérgica, por lo que murió, hechos que ocurrieron en Argentina.
La mujer, de nombre Marta Inés Acosta, quien tenía 71 años, fue al médico por un dolor de piernas, por lo que el cirujano, Vicente Martín Bordazahar, le realizó una cirugía, pero lo que sería sencillo terminó en una tragedia al recetarle posteriormente diclofenaco.
Fue el 20 de mayo del presente año que la pena fue anunciada, y Vicente Martín permanecerá en prisión por dos años y 10 meses, incluso recibió ocho años de inhabilitación para ejercer medicina, aunque hasta que la sentencia quede firme podrá continuar trabajando.
Marta se había quedado viuda en 1988, su marido, Néstor Abel Martínez, quien trabajaba en la Juna Nacional de Granos, sufrió un letal infarto a los 52 años. La vida le dio otro golpe en 1996, cuando uno de sus cuatro hijos se desnucó en un choque cuando viajaba con dos amigos.
La mujer puso un almacén en las calles 52 y 73, a pesar de que ya estaba jubilada, no dejaba de levantarse temprano, de hace fuerza con los cajones de mercadería, lo que le generó una eventración en la cicatriz de una operación de hernia abdominal que le habían hecho en 2012 en la misma clínica.
¿Marta recibió mala atención en la clínica?
En la ventanilla de administración le hicieron firmar a la nuera de la mujer el formulario del consentimiento sin leerlo. A la paciente le aplicaron el diclofenaco vía suero, en la habitación, a pesar de que en la historia clínica aparecía en rojo que era alérgica a esta medicina, y en las maniobras de resucitación cardiopulmonar no le inyectaron adrenalina.
Por este hecho, también fue imputada la enfermera Laura Fabiana Stéfano, quien no se presentó al debate en el juzgado, por lo que será declara en rebeldía y deberá ser sometida a un nuevo juicio.
Marta Inés no era una paciente desconocida en la clínica, estaba afiliada al Programa de Atención Médica Integral (PAMI), y ya era la cuarta vez que pasaba por el quirófano. Además de la intervención por la hernia abdominal, la habían operado de la vesícula y de la cadera.
“El médico sabía que ella era alérgica. Se lo dijo en el consultorio de la calle 60. Mi mamá era terriblemente miedosa con eso, le tenía terror”, dijo el hijo mayor de la víctima.
AA