Un potente ciclón bomba con fuertes tormentas, nevadas y vientos golpeó la costa este de Estados Unidos, por lo que miles de vuelos fueron cancelados, así como se activaron las alertas meteorológicas para una región donde habitan alrededor de 70 millones de personas.
Las afectaciones del ciclón bomba suceden especialmente en el noreste de Estados Unidos, en donde azota a ciudades de Nueva York y Boston, así como se traslada hacia el sur del Atlántico.
Estas alertas acerca de heladas y tormentas de nieve fueron emitidas inclusive en Florida, al sureste del país estadounidense, donde el Servicio Meteorológico Nacional (NWS) notificó sobre el peligro de caída de iguanas de los árboles, ya que terminan congeladas temporalmente.
Actualmente, máquinas esparcidoras de sal y quitanieves trabajan en las calles de Nueva York, ya que desde la mañana del 29 de enero se acumulaban aproximadamente 10 centímetros de altura de nieve.
Por su parte, Eric Adams, alcalde de Nueva York, solicitó a través de Twitter, que los ciudadanos se quedaran en casa, ya que las condiciones para permanecer en las calles se consideran riesgosas.
Alrededor de tres mil 500 vuelos internacionales como nacionales, fueron cancelados en Estados Unidos, de acuerdo al rastreador de viajes FlightAware. Un aproximado de 700 vuelos que tendrían que despegar el 30 de enero también han sido suspendidos.
NWS prevé que a lo largo de las costas del Atlántico y Nueva Inglaterra habrá acumulaciones de nieve presentidas de más de 60 centímetros en las afueras de Boston, debido a las condiciones peligrosas de tormenta de nieve.
De acuerdo a pronósticos en Estados Unidos, se esperan nevadas de entre 60 y 120 centímetros por hora, así como fuertes vientos que podrían causar cortes de energía dispersos. Asimismo, se estiman apagones y la dificultades para transitar en carreteras.
AA