El rapero Kanye West, ahora conocido como Ye, fue suspendido de Twitter y de Instagram el mes pasado y las plataformas eliminaron algunas de sus publicaciones en línea que los usuarios condenaron como antisemitas, ya que hablaba en contra de la comunidad judía.
Sin embargo, el perfil de Twitter del rapero pareció estar de nuevo en la plataforma, un día después de que el multimillonario Elon Musk se hizo con la propiedad de la empresa, luego de comprarla por 44 mil millones de dólares, según diversos medios en Estados Unidos.
Ye, que cuenta con más de 30 millones de seguidores en Twitter, ha suscitado controversia en los últimos meses al poner fin públicamente a importantes acuerdos corporativos y al lanzar exabruptos en las redes sociales contra otras celebridades.
El 8 de octubre, Musk había tuiteado '¡Bienvenido de nuevo a Twitter amigo mío!', cuando Kanye West publicó en la plataforma por primera vez en dos años después de que su cuenta de Instagram fuera restringida.
Musk se hizo cargo de despedir a altos ejecutivos, pero tuvo poca claridad sobre cómo va a lograr las ambiciones que ha esbozado para influir en la plataforma de redes sociales.
Musk, también CEO de Tesla Inc. y autodenominado absolutista de la libertad de expresión, ha establecido objetivos para evitar que la plataforma se convierta en una cámara de eco para el odio y la división.
"Adquirí Twitter porque es importante para el futuro de la civilización tener un lugar digital común, donde se pueda debatir una amplia gama de creencias de manera saludable, sin recurrir a la violencia. Actualmente existe un gran peligro porque las redes sociales dividen a nuestra sociedad", expresó Musk.
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También ha dicho que revertiría la prohibición de Twitter sobre el ex presidente de Estados Unidos Donald Trump, cuya cuenta fue eliminada tras el ataque al Capitolio. El republicano dijo el viernes que se alegró de que Twitter estuviera en ‘manos cuerdas'.
SCA