ESTADOS UNIDOS. - El gobierno de Donald Trump dijo este martes que está liberando millones de dosis de la vacuna COVID-19 que había estado reteniendo para las segundas inyecciones e instó a los estados a ofrecerlas a todos los estadounidenses mayores de 65 años o con condiciones de salud crónicas.
El secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, dijo durante una sesión informativa que el ritmo de inoculaciones en Estados Unidos se ha elevado a 700 mil inyecciones por día y se espera que aumente a un millón por día dentro de una semana a 10 días.
La semana pasada, el portavoz de Joe Biden dijo que el presidente electo, que asumirá el cargo la próxima semana, acelerará la distribución de las vacunas COVID-19 y pondrá en marcha las inoculaciones atrasadas liberando más dosis.
La mayoría de los estados dieron prioridad a los trabajadores de la salud, al personal y los residentes de los asilos de ancianos para sus primeras entregas de vacunas para el COVID-19 que comenzaron el mes pasado, siguiendo las recomendaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
El proceso de inoculación de estos grupos ha sido lento debido en parte a la complejidad de la administración de las vacunas.
El doctor Robert Redfield, director de los CDC, dijo el martes que "recomienda encarecidamente" que las vacunas se pongan a disposición de las personas mayores de 65 años y de los menores de 65 años que tengan otras condiciones de salud crónicas.
La semana pasada, los CDC dejaron claro que los estados pueden pasar al siguiente grupo prioritario -personas mayores de 75 años y trabajadores esenciales- sin haber terminado la primera ronda de inoculaciones, pero menos de 20 estados lo han hecho. Un puñado de estados, incluyendo Texas, Florida y Georgia han comenzado a colocar las vacunas a personas mayores de 65 años.
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