Desde hace más de cinco mil años, en Qatar cazan con halcones, aves que son parte esencial de su cultura, orgullo del legado familiar y objeto de un negocio millonario en el que el lujo refleja la devoción por esta tradición milenaria.
En el país, estas aves significan tesoros que llegan a costar de cuatro mil a 10 mil dólares en el mercado, y no sólo se utilizan para exhibirlas, participar en torneos internacionales, como afición o crianza, sino que también como una mascota familiar a la que se entrena, se cuida y se protege. Un mundo desconocido para descubrir en profundidad durante la Copa del Mundo de Qatar 2022.
“Los cataríes saben que nosotros no lo llamamos deporte, lo llamamos estilo de vida”, dice Zayide Al-Ali, secretario y director de comunicación de la asociación cultural Al Gannas, fundada en 2008 para impulsar la caza tradiciones árabe con halcones, su protección fomentar la investigación y organizar eventos internacionales.
“Nuestra asociación es una de las más importantes del mundo en materia de rehabilitación de aves de presa, pero también cuidamos a las aves en general en todo el mundo. Las protegemos del contrabando, de morir electrocutadas o de intoxicaciones. Intentamos ayudarlas a que vivan. Soltamos halcones cada año, en la frontera con Rusia para que se reproduzcan”, dijo Zayide.
Se trata de una actividad en la que el cuidado y el entrenamiento de las rapaces son clave, formándose un vínculo único entre el entrenador y el animal, que perfecciona su resistencia y capacitación.
“Esta pequeña ave es muy poderosa. Pero al mismo tiempo es muy inteligente. Piensan. Reaccionan y no olvidan nada de lo que les enseñas”, confirmó Zayide.
Las habilidades de caza del halcón son clave, pero su belleza lo es por igual, y en el mercado cataría se buscan siempre las piezas más singulares.
¿Por qué estos halcones son tan costosos?
Su color, procedencia y raza con las características que hacen al halcón único, de este modo, en Qatar se paga más por un ave blanca debido a razones estéticas, siempre se valor más a una hembra al poder criar, y si su procedencia es salvaje, generalmente de las etapas mongolas o iraquíes, el precio se dispara.
“En Qatar, cuanto más grande y más blanco, más caro eso. Les encanta el color blanco. Y las hembras son las más caras para la cría”, aseguró Alberto Relaño, representante de un negocio familiar de esculturas de halcones en bronce en España que acude por sexto año consecutivo a la feria catarí con su escaparte de Bronces Relaño.
AA