El concejal de una localidad en el oeste de Ucrania lanzó tres granadas de mano durante una reunión el 15 de diciembre, provocándose heridas de gravedad a él mismo y a al menos 20 personas más, anunciaron las autoridades.
Un video publicado en redes sociales mostraba a un hombre ingresar a una sala donde se reunía el consejo municipal de Keretsky para discutir y aprobar el presupuesto de la comunidad. Antes de que se corte el clip, se escucharon varias explosiones y gritos de pánico.
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El hombre, identificado preliminarmente como Serhii Batryn, un concejal del partido político Servidor del Pueblo, al que pertenece el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, sacó tres granadas de sus bolsillos, les quitó los seguiros y las aventó al suelo delante de él.
La policía de la región de Transcarpatia dio a conocer en un comunicado que 26 personas habían resultado lesionadas, seis de ellas de gravedad. El hombre que hizo estallar las granadas sufrió heridas graves y los médicos trabajaban para salvarle la vida, dijo la policía.
“En la comunidad de Keretsky, durante una sesión, un diputado local arrojó granadas en la sala de sesiones (…) Resultaron heridos 26 diputados y empleados del ayuntamiento. Todas las víctimas fueron trasladadas inmediatamente a centros de salud”, manifestó Viktor Mikita, gobernador de Transcarpatia.
Hasta ahora no hay noticias acerca de un posible móvil o si el ataque estaba implicado con la guerra rusa en Ucrania. Además, las autoridades indicaron que muchos ucranianos tienen acceso a armas desde el comienzo de la invasión en febrero de 2022.
¿Habrá consecuencias legales para el concejal?
Batryn es investigador por uso ilegal de armas, municiones o explosivos, un delito contemplado en el Código Penal ucraniano. Las autoridades catalogaron los hechos de “ataque terrorista”, según la AFP.
El gobernador de Transcarpatia informó que se investigan las circunstancias del crimen y que se había convocado una reunión de urgencia del Consejo de Defensa de la región.
Cabe señalar que la posesión y transporte de granadas, al igual que muchas otras armas y dispositivos explosivos, suele ser ilegal en la mayoría de los lugares debido a preocupaciones de seguridad pública. Estas medidas están diseñadas para prevenir el uso indebido de armas y minimizar el riesgo de accidentes, delitos violentos o actos terroristas.
La regulación de armas y explosivos varía según las leyes y regulaciones de cada país o jurisdicción. En muchos casos, se requiere una autorización especial, como una licencia o permiso, para poseer o transportar dispositivos explosivos. Estas restricciones se implementan para salvaguardar la seguridad de la sociedad en general.
AA