BUENOS AIRES. — La justicia argentina investiga el robo de 30 dosis de la vacuna Sputnik V contra coronavirus de un hospital público del sur del país.
El faltante se detectó a principios de febrero en el hospital regional de la localidad de Comodoro Rivadavia, provincia de Chubut, a unos 1.500 kilómetros al sur de Buenos Aires.
La noticia trascendió recién este lunes y fue confirmada por las autoridades locales, que denunciaron el robo ante la justicia.
“Espero el pronto esclarecimiento de quién o quiénes fueron los responsables de este hecho lamentable”, dijo el alcalde de Comodoro Rivadavia, Juan Pablo Luque.
El ministro de salud provincial, Fabián Puratich, detalló en declaraciones a medios locales que el material robado “corresponde a unidades del segundo componente” de la vacuna producida en Rusia, la única que se aplica en estos momentos en el país sudamericano.
Las dosis se guardaban en un refrigerador ubicado en el sector donde se aplicaban las vacunas a médicos y personal sanitario. Según Puratich, los accesos al lugar “no fueron violentados”, por lo que se sospecha que el responsable del robo trabajaría en el centro médico.
Hace un mes Chubut tuvo que descartar 140 dosis de la vacuna rusa por un desperfecto técnico que afectó la cadena de frío.
Argentina, con dos millones de contagios y unos 50.000 fallecidos, sufre como otros países de la región la escasez de vacunas. Si bien en la última semana llegaron más dosis de Sputnik V y se espera para los próximos días el primer cargamento de la producida por AstraZeneca, no son suficientes para inmunizar al corto plazo a una población de 40 millones de habitantes.
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