Un 22 de noviembre pero de 1963, fue asesinado John F. Kennedy, entonces presidente de Estados Unidos. Kennedy murió en su limusina presidencial descapotable tras recibir un disparo en la cabeza en Elm Street, Dallas, por Lee Harvey Oswald. A continuación, te presentamos la cronología de su asesinato.
El asesinato de Kennedy
El 22 de noviembre de 1963, hace 59 años a las 12:30 horas, Harvey Oswald puso fin a la vida del ex presidente de Estados Unidos John F. Kennedy quien estaba en compañía de su esposa, disparándole en tres ocasiones.
Harvay Oswald le disparó desde el sexto piso de un almacén de libros de Texas, para posteriormente intentar huir, hiriendo a su paso a un policía. Pero fue arrestado en un teatro a las 13:50 horas, a escasos 20 minutos de hacer oficial la muerte del entonces presidente estadounidense.
Una muerte que marcaría al resto del país
Días antes, el 11 del mismo mes, Kennedy había colocado una corona de conmemoración por el Día de los Veteranos en la tumba de un soldado desconocido y dos semanas después fue enterrado en el mismo cementerio.
El asesinato del presidente a sus 46 años fue una "profunda tragedia nacional" que "sigue resonando en la historia de Estados Unidos y en la memoria de tantos estadounidenses que vivieron ese terrible día", según un comunicado de la Casa Blanca. Además, Kennedy fue el cuarto presidente asesinado en una nación que no tenía más de 200 años de haberse fundado.
La muerte de Kennedy fue investigada por 10 meses por el entonces presidente del Tribunal Supremo, Earl Warren, quien concluyó que Lee Harvey Oswald, ex marine que había residido en la Unión Soviética, actuó solo cuando disparó contra el convoy de Kennedy. Pero las indagaciones de la comisión fueron criticadas por ser incompletas, y un comité del Congreso concluyó más tarde que Kennedy fue "probablemente asesinado como resultado de una conspiración". Sin embargo, la verdadera razón aún es desconocida.
El modus operandi de Oswald
Siete semanas antes de que el mundo asistiera al magnicidio de John F. Kennedy, Lee Harvey Oswald —el hombre acusado por ese crimen— merodeó en las calles de la Ciudad de México. Se sabe que buscó refugio en la embajada cubana y soviética en busca de una visa que le permitiera llegar a la URSS. No obstante, las intenciones concretas de aquella visita son todavía parte de un paisaje nebuloso y plagado de interrogantes.
Sin embargo, varios expertos como el ex reportero de investigación del New York Times Phillip Shenon, ven a México como el mejor lugar para encontrar respuestas sobre una posible conspiración y a quien estuvo detrás del asesinato de Kennedy.
México fue un punto importante de la Guerra Fría a mediados del siglo XX, un refugio para exiliados soviéticos, izquierdistas estadounidenses que huían de la persecución anticomunista y simpatizantes del régimen de Castro en Cuba.
Todos los países comunistas y democráticos tenían una embajada en la Ciudad de México, el único lugar del hemisferio occidental donde estos enemigos coexistían más o menos abiertamente.
Según testigos de las misiones diplomáticas cubana y soviética, Oswald visitó repetidamente sus embajadas el viernes y sábado, buscaba desesperadamente visas para esos países, que los estadounidenses tenían prohibido visitar. Cuando le dijeron que los documentos tardarían meses en procesarse, Oswald tuvo una acalorada discusión con el cónsul cubano, Emilio Azcué. También obligó a cancelar un partido de voleibol de la KGB el sábado por la mañana cuando blandió un arma en el consulado soviético, antes de romper a llorar y marcharse.
Esos eventos están documentados por la CIA, que en la década de 1960 había intensificado sus operaciones en México para monitorear la actividad comunista, incluso contratando a 200 agentes mexicanos para ayudar. El Servicio Secreto Mexicano ha comenzado a desclasificar recientemente, también rastreó a Oswald el 27 de septiembre y el 28 de septiembre de 1963. Sin embargo, se desconoce el paradero de Oswald durante los próximos tres días y medio.