Investigadores de la Universidad de Australia del Sur confirmaron que los fines de semana deberían durar tres días en beneficio a la salud de las personas, de acuerdo a resultados de una nueva investigación empírica.
Según los investigadores, cuando se trata de un fin de semana duradero, están totalmente involucrados, mientras se prueba una semana laboral de cuatro días en países de todo el mundo, y no como suele ser, que es de cinco días.
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Al evaluar los cambios en los movimientos diarios antes, durante y después de las vacaciones, los investigadores descubrieron que las personas mostraban comportamientos más activos y saludables cuando estaban de vacaciones, hasta cuando únicamente tenían un descanso de tres días.
En este estudio que duró 13 meses, generalmente, las personas tomaron un promedio de dos a tres vacaciones, cada una de alrededor de 12 días. El tipo de vacaciones más habitual fue la recreación al aire libre con un 13 por ciento, seguido de eventos familiares con un 31 por ciento, descanso y relajación con 17 por ciento y actividades no lúdicas como el cuidado de otros o las renovaciones del hogar con un 17 por ciento.
¿Qué hacían las personas en vacaciones?
• Participaron en un 13 por ciento más de actividad física moderada a vigorosa cada día.
• Fueron un cinco por ciento menos sedentarios cada día.
• Dormían un cuatro por ciento más cada día.
Por su parte, el doctor Ty Ferguson, investigador de UniSA, mencionó que la investigación señala que las personas muestran comportamientos más saludables cuando están de vacaciones.
“Cuando las personas se van de vacaciones, están cambiando sus responsabilidades diarias porque no están encerradas a su horario normal (…) En este estudio, encontramos que los patrones de movimiento cambiaron para mejor cuando se está de vacaciones, con una mayor actividad física y una disminución del comportamiento sedentario observada en todos los ámbitos”, manifestó Ferguson.
Carol Maher, investigadora principal de UniSA, comentó que el estudio brinda apoyo para el creciente movimiento durante una semana de cuatro días.
“Una semana laboral más corta está siendo probada por empresas de todo el mundo. No es sorprendente que los empleados reportaran menos estrés, agotamiento, fatiga, así como una mejor salud mental y un menor equilibro entre la vida laboral y personal”, mencionó Maher.
AA