El nuevo cohete lunar de la NASA llegó a la plataforma de lanzamientos en Florida, Estados Unidos para ser enviado a la Luna el 29 de agosto.
El cohete debutará en menos de dos semanas en una prueba lunar, no habrá ningún tripulante en la cápsula, sólo tres maniquíes armados con sensores para medir la radiación y vibraciones
El cohete de 98 metros (322 pies) emergió de su enorme hangar el martes por la noche, atrayendo a una muchedumbre de trabajadores del Centro Espacial Kennedy. Le tomó casi 10 horas al cohete ser trasladado a 6.4 kilómetros (4 millas) hasta la plataforma, llegando al amanecer.
La cápsula Orion volará alrededor de la Luna en una órbita distante por un par de semanas, antes de regresar para un descenso sobre el Pacífico. El vuelo deberá durar seis semanas.
El vuelo es la primera misión lunar del programa Artemis de la NASA. La agencia espacial apunta a un vuelo tripulado a la órbita lunar en dos años y un alunizaje con astronautas para 2025. Eso es mucho más tarde que lo que anticipaba la NASA cuando estableció el programa hace más de una década, cuando retiró la flotilla de transbordadores. Los años de demoras han añadido miles de millones de dólares al costo.
El nuevo cohete lunar SLS es 12 metros (41 pies) más corto que los Saturn V utilizados en las misiones Apolo hace medio siglo, pero es más poderoso, usando una etapa central con cuatro motores y dos propulsores adjuntos, similares a los usados para los transbordadores.
"Cuando miras el cohete, casi parece algo retro. Parece que estamos regresando al Saturn V. "Pero es un cohete y una nave totalmente diferente, nuevo, altamente sofisticado", expresó este mes el administrador de la NASA, Bill Nelson.
Cabe mencionar que el programa Apolo hizo que sólo hombres blancos caminaran sobre la Luna, pero Artemis planea enviar a la primera mujer y la primera persona negra.
El objetivo es hacer de la Luna una base donde se desarrollen las tecnologías necesarias para enviar humanos a Marte.
MRG