ESPECIAL.- La Organización Panamericana de la Salud (OPS) reconoció que existe “un cuello de botella que evita que aún nosotros llevemos vacunas a todos los países al mismo tiempo” y, por ello, pasarán “muchos meses” para controlar el covid-19 que, aunque ha descendido en infecciones en México y en Estados Unidos, circula con mayor velocidad en Brasil.
En conferencia de prensa, Carissa F. Etienne, directora de la OPS, precisó en los próximos días el Fondo Rotatorio de la OPS entregará cerca de 728 mil vacunas a cinco países de un pedido global de 3.4 millones, y se puso como meta entregar dotaciones a las naciones que forman parte del mecanismo Covax antes del 7 de abril, cuando se conmemora el Día Mundial de la Salud.
“Con las campañas de vacunación contra covid-19 en curso, ya en toda la región, estamos viendo el comienzo del final de esta pandemia, pero si bien hay motivos para tener esperanza también tenemos que recordar que las dosis son limitadas y pasará muchos meses antes de que podemos depender de la vacuna para controlar el virus”.
Precisó que “nos alegra ver que las vacunas a través de Covax se están entregando, pero reconocemos que la necesidad de contar con más vacunas, incluso más rápido, es mayor en las Américas. En este momento sólo tenemos a dos fabricantes que están despachando vacunas a decenas de países de todo el mundo, y es un cuello de botella que evita que aún nosotros llevemos vacunas a todos los países al mismo tiempo”.
Se busca que Covax distribuya dosis antes del 7 de abril
Dijo que la meta es asegurar que cada uno de los países de la región y que participan en el mecanismo Covax reciban el primer envío antes del 7 de abril. El hecho de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) expidiera una licencia para uso de emergencia de la vacuna de Johnson&Johnson logró que se contara con una cuarta vacuna autorizada y, en este caso, la particularidad es que ofrece protección con una sola dosis.
“Esta vacuna promete acelerar las acciones de vacunación, Covax ha obtenido más de 100 millones de la vacuna de Johnson&Johnson en 2021, y hasta 500 millones hasta el año 2022 con la esperanza de empezar a recibir las dosis a partir de junio. Interrumpir esta pandemia exige que limitemos las infecciones pero también ampliemos el acceso a las vacunas. Entonces no debemos bajar la guardia, mantengamos la esperanzas”.
México y EU, con caída de infecciones
En la última semana un millón 300 personas contrajeron contrajeron covid-19 en las Américas y cerca de los 31 mil perdieron la vida por el virus, “Estados Unidos y México están notificando una caída en infecciones nueva de infecciones nuevas, mientras que en Canadá se está acelerando las infecciones entre adultos jóvenes entre 20 y 39 años de edad”.
Existen algunos sitios como Uruguay, Ecuador y Venezuela en donde hay incrementos, en tanto que en la última semana el sistema de salud de Paraguay emitió una alerta urgente debido a la saturación hospitalaria.
Brasil, con mayor número de casos nuevos en América Latina
En Lima, Perú, así como, Río de Janeiro, Brasil, también han impuesto toques de queda y cierras para controlar este incremento acelerado. Sobre todo, Brasil está notificando el mayor número de infecciones nuevas en la región y el número de muertes diarias por covid-19 es el segundo más alto en el mundo.
“Varias regiones en Brasil están siendo testigo de infecciones en un número récord, también las camas hospitalarias están capacidad máxima a su capacidad máxima. La situación en Brasil es un cuento con moraleja, es decir, para mantener este virus bajo control se exige de la atención continua de la autoridad de la salud, de los dirigentes, sobre el impacto devastador del virus”, dijo tras hacer alusión a las reuniones de fin de año y el carnaval reciente.
Los sistemas de salud en diferentes medidas siguen atravesando por una crisis y falta mucho para que termine, por ello, se requieren de líderes que fomenten políticas públicas bajo bases científicas de protección y que no exhiban las fallas de nuestro sistemas.
“Una lección importante que nos ha dado a lo largo de este año la pandemia es que nuestro sistemas de salud se centró en fortalecer los hospitales en lugar de la atención primaria -el primer nivel de atención- , que debe ser el punto de ingreso y la piedra angular el sistema de salud, lo que limitó la eficacia de la respuesta a covid-19, ha perturbado también los servicios esenciales y ha debilitado la capacidad para abordar otros problemas de salud durante la pandemia”.
Por años, la OPS “ha recomendado una inversión de al menos de seis por ciento del Producto Interno Bruto en la salud”. Explicó que el bienestar económico de un país está vinculado directamente con la fortaleza de su sistema de salud.
“Los sistemas fuertes de salud son más resistentes y responden mejor a las emergencias, también se recuperan mejor y más rápidamente después de la crisis”.
mvls