Carlos III fue proclamado como el nuevo rey del Reino Unido desde el balcón del palacio de Saint James en Londres, esto tras la muerte de la Reina Isabel II.
En una solemne ceremonia la primera ministra Liz Truss y todos sus predecesores vivos, el Consejo de Ascensión firmó y anunció la proclamación del nuevo rey.
En su discurso, el Carlos III afirmó que será profundamente consciente de "esta gran herencia y de los deberes y pesadas responsabilidades de soberanía que ahora me han pasado".
David White, el rey de Armas de la Jarretera, hizo la proclamación flanqueado por trompetistas con túnicas adornadas en oro antes de encabezar vítores: "¡cadera, cadera, hurra!" para el nuevo rey.
Los saludos con armas sonaron en Hyde Park, en la Torre de Londres y en sitios militares de todo el Reino Unido cuando anunció la noticia, y los soldados vestidos de escarlata en el patio del palacio se quitaron sus sombreros de piel de oso en un saludo real.
Siguiendo un protocolo cuidadosamente diseñado desde hace tiempo, el hijo de 73 años de la difunta reina se instala poco a poco en la jefatura de Estado y en el corazón de los británicos.
Los cañones dispararon salvas en su honor a lo largo y ancho del Reino Unido.
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