En la vida de la Reina Isabel II la relación con su hermana la princesa Margarita fue un tanto problemática debido a que ambas tenían personalidades diferentes, sin embargo, también es cierto que tuvieron una gran amistad y cariño una hacia la otra, y el apoyo de su hermana menor ayudó a Isabel II sobrellevar la enorme tarea de gobernar un reino.
Las hermanas, hijas del Rey Jorge VI, tuvieron varios momentos de conflicto importantes que marcaron su relación y la historia de la Familia Real Británica.
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La sucesión al trono de Isabel
Margarita Rosa era 4 años menor que su hermana mayor, en su infancia ambas compartieron educación y fueron tratadas de una manera equitativa, pero tras la abdicación de su tío, el Rey Eduardo VIII, la dinámica entre las hermanas cambió luego de que la sucesión al trono se redirigió hacia su familia.
Posteriormente, con tan solo 25 años de edad, Isabel tuvo que convertirse en reina tras el fallecimiento de su padre a consecuencia del cáncer de pulmón que padecía, lo que relegó a Margarita en un segundo plano, pero esto le dio más libertad para tener una vida sin el peso de una nación sobre sus hombros.
Isabel y Margarita: personalidades opuestas
En una ocasión, el Rey Jorge VI hizo dijo sobre sus hijas: “Lilibet es mi orgullo. Margarita es mi alegría”, lo que dejó entrever las personalidades de las hermanas.
De acuerdo con Craig Brown, autor del libro Ninety-Nine Glimpses of Princess Margaret, describió cómo eran percibidas las hermanas ante el ojo público:
"Elizabeth fue organizada, Margaret artística; Elizabeth discreta, Margaret llama la atención; Elizabeth obediente, Margaret desobediente; Elizabeth disciplinada, Margaret salvaje”.
La no aprobación de la Reina Isabel al matrimonio de Margaret
El romance entre la princesa Margarita con Peter Townsend, quien fue un oficial de la Real Fuerza Aérea Británica, estaba casado y era 16 años mayor que ella; fue un punto de inflexión importante en la relación entre las hermanas reales.
Townsend conoció a Margarita en 1947, cuando ella tenía solo 17 años, y desde entonces iniciaron una relación, la cual era del conocimiento de la Reina Isabel, quien en su rol como hermana apoyó a Margarita en su aventura amorosa con Townsend, pero como monarca no podía aprobarlo.
Tras varios años de relación, en 1953 Peter se divorció de su primera esposa y le pidió matrimonio a Margarita, sin embargo, la Reina Isabell II le dijo que esperara hasta cumplir 25 años para casarse con Townsend, pero el casamiento nunca fue aprobado por el gobierno ni la Iglesia Anglicana.
Ante la negación de las instituciones, la princesa se vio forzada a decidir entre el amor de su vida o sus derechos reales, pues de continuar con su matrimonio con Townsend debía renunciar a su derecho de sucesión.
En 1955, la princesa Margarita anunció la cancelación de sus intenciones de matrimonio con Peter Townsend para cumplir con su deber ante su país.
Pese a estos momentos difíciles, la hermandad entre la Reina Isabel y Margarita logró sobreponerse, ambas se convirtieron en cómplices y confidentes que se amaban y apoyaban la una como cualquier otro ser humano.
Cuando la princesa Margarita falleció en 2002, durante el funeral en la Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor, la Reina Isabel lloró abiertamente mientras veía cómo se llevaban el ataúd de su hermana, una de las únicas ocasiones en las que la monarca mostró sus emociones en un lugar público.
AGA