Una gran cifra de trabajadores de crematorios en Beijing, China, confirmaron el 16 de diciembre que sus establecimientos están desbordados debido a la ola de casos de covid, que de acuerdo a las autoridades, pronto llegará a las zonas rurales del país.
Luego de una semana que se levantó la mayoría de las restricciones en vigor desde hace casi tres años, la epidemia se está propagando con rapidez por toda China. Las autoridades han aceptado que actualmente es “imposible” contabilizar el número de casos.
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“Incineramos 20 cuerpos al día, principalmente ancianos. Muchas personas enfermaron recientemente (...) De los 60 que trabajamos aquí, más de 10 son positivos de covid, pero no tenemos opción, ya que hay muchísimo trabajo”, dijo un trabajador de un crematorio.
Los empleados de otras dos funerarias de Beijing señalaron que sus establecimientos están trabajando las 20 horas, brindando servicios de cremación el mismo día para responder a la fuerte demanda. Inclusive, otro establecimiento de este tipo indicó que su lista de espera es de una semana.
No obstante, las cifras oficiales no contabilizan ninguna muerte implicada con covid desde el 4 de diciembre.
La organización de lucha contra el covid instó el 16 de diciembre a los gobiernos locales a incrementar la vigilancia y la atención médica para las personas que vuelven a sus casas en las zonas rurales, de cara a las fiestas del Año Nuevo chino, en enero.
El evento causa al año el mayor desplazamiento de población del mundo, se espera que este año sea todavía más grande, ya que se levantaron las restricciones de viaje entre provincias.
Medios de comunicaciones estatales y expertos en salud chinos, minimizan el riesgo de la variante ómicron, y el profesional en enfermedades respiratorias Zhong Nanshan, propuso modificar el nombre de covid por “resfriado del virus”.
Pero millones de personas de edad avanzada no fueron vacunadas, y las pruebas de antígenos, así como medicamentos contra la fiebre, escasean.
AA