Todo el planeta padeció el 4 de julio el día más caluroso del que se tenga registro en al menos 44 años, y este miércoles podría romperse el récord, según expertos de la Universidad de Maine que participan en el proyecto Climate Reanalyzer.
Estos son los últimos datos acerca de cambios en el clima que preocupan, pero ya no sorprenden a los científicos. El 3 de julio, la temperatura promedio de la Tierra fue de 17,01°C (62,6 Fahrenheit), mientras que el martes fue de 17,18°C (62,9 °F), que es un gran aumento en términos de promedios mundiales y registros.
La temperatura del 4 de julio fue casi un grado Celsius más caliente que el promedio de 1979 a 2000, que es en sí más caluroso que los promedios de siglos XX y XIX. Los expertos estimaban una temperatura parecida para este 5 de julio. En la Antártida se registraría un promedio de 4,5°C más caluroso que la media de 1979-2000.
El 3 de julio, la temperatura promedio global fue de 17,01°C, y aunque puede no parecer tan alta, es la primera vez en los 44 años de este conjunto de datos que la temperatura supera la marca de 17°C y luego subió todavía más.
Pese a que no es un registro oficial de la Asociación Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA).
“Esto nos muestra dónde estamos ahora”, dijo la científica jefa en la NOAA, Sarah Kapnick. Aunque los datos usados para el récord no oficial datan sólo a 1979, ella añadió que tomando en cuenta otra información, es posible que sea el “día más caluroso que hayamos experimentado en cientos de años”.
Los registros de altas temperaturas se superaron el 3 y 4 de julio en Quebec, y el noroeste de Canadá y Perú. Diferentes ciudades de Estados Unidos han estado oscilando en máximos históricos, según Zack Taylor, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional
Incluso, hay alertas de calor excesivo de Arizona a California. Beijing reportó nueve días seguidos la semana pasada, cuando la temperatura rebasó los 35°C.
“El aumento del calentamiento de nuestro planeta causado por el uso de combustibles fósiles no es inesperado. Después de todo, ya se predijo en el siglo XIX (…) Pero es peligroso para nosotros los humanos y para los ecosistemas de los que dependemos. Tenemos que detenerlo rápido”, mencionó el científico climático Stefan Rahmstorf del Instituto de Investigación Climática, en Potsdam, Alemania.
Climate Reanalyzer captura legítimamente el calentamiento a escala global y la NOAA tendrá que en cuenta estos números cuando haga sus cálculos de registros oficiales, dijo Deje Arndt, director del Centro Nacional de Información Ambiental, una división de la NOAA.
AA