A principios de octubre se dio a conocer que un turista español llamado Santiago Sánchez, que decidió viajar a pie hacia Qatar para ver la Copa Mundial, desapareció antes de llegar a Irán.
Durante su viaje, el turista de 41 años mantenía informada a su familia sobre su travesía, y fue de manera repentina que ya no supieron nada de él.
Según su familia, el último mensaje que les envió Santiago fue: “Esto está un poco caliente, pero todo bien”, dijo Sánchez.
Después de varias semanas se informó que el turista madrileño se encuentra preso en Irán. Según el grupo opositor kurdo- iraní, 'Hengaw Organization for Human Rigths', Santiago Sánchez fue detenido por el Ministerio de Inteligencia iraní tras visitar la tumba de Mahsa Amini , la joven que murió a manos de la Policía de Irán por no usar su velo correctamente.
La muerte de esta joven ha provocado una fuerte ola de protestas en el país contra el gobierno iraní y, en medio de esa revuelta social, la familia ha mostrado su preocupación por cómo podría afectar esta situación a Sánchez, según la agencia The Associated Press.
Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores han señalado que la Embajada en Teherán está en contacto permanente con las autoridades iraníes desde que se tuvo noticia de la desaparición de Sánchez y actualmente están tratando de verificar las informaciones acerca de su paradero.
“Estamos en contacto permanente con las autoridades iraníes para verificar las informaciones acerca de su paradero y poder prestarle, con carácter inmediato, asistencia consular”, comunicó la Embajada.
De esta manera, si se confirma que se encuentra detenido, se le brindará con carácter inmediato asistencia consular, como ocurre en todos los casos en que españoles son encarcelados en otros países.
A través de Instagram, Santiago Sánchez ha ido publicando todos estos meses imágenes sobre su paso por distintos países. La última publicación que subió a su perfil oficial de Instagram fue del último pueblo en el norte de Irak. En el pie de foto, el ex militar detallaba que le separaba 'una montaña para llegar a Irán, el siguiente país antes de Qatar', donde le esperaba una familia que se enteró de su viaje y querían compartir un día con él.
SCA