SAN JUAN. - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump criticó el jueves duramente a gobernantes de Puerto Rico, un día después de que miles de personas protestaron exigiendo la renuncia del gobernador de la isla en crisis por conversaciones filtradas en las que profiere insultos misóginos y se mofa de la gente que representa.
“Muchas cosas malas están pasando en Puerto Rico”, tuiteó Trump, agregando que, “El Gobernador está siendo atacado” y burlándose de la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, quien critica frecuentemente al presidente, tachándola de “persona incompetente y despreciable en la que no confiaría bajo ninguna circunstancia”.
Trump argumentó que gran parte de los fondos aprobados por el Congreso tras el paso del devastador huracán María “fue despilfarrado o desperdiciado, y nunca más se volvió a ver”, y agregó que, “¡la mayor parte de (Puerto Rico) es corrupta & está robando al ciego Gobierno de EE.UU!”
Entre tanto, el gobernador Ricardo Rosselló emitió un comunicado diciendo que respeta la manifestación del miércoles como un “ejercicio democrático” y “una manifestación natural del encono ante los sucesos recientes”, pero que no renunciará.
“Creo firmemente en que es posible restaurar la confianza”, dijo Rosselló, agregando que ha pedido y sigue pidiendo disculpas a los puertorriqueños.
El territorio estadounidense está tratando de salir de un desastre financiero por causa de deudas, así como de una recesión de más de una década.
También está pidiendo más ayuda federal para recuperarse del azote de María, que devastó la red eléctrica de la isla, y de su incapacidad para ofrecer cuidado a los ancianos y enfermos.
Algunas de las personalidades más conocidas de Puerto Rico, como los cantantes Ricky Martin, Residente y Bad Bunny, participaron en la marcha del miércoles, algunos de ellos portando banderas puertorriqueñas de color blanco y gris, en vez de los colores oficiales rojo, blanco y azul, para manifestar su descontento.
Muchas personas en Puerto Rico están furiosas por lo que consideran la negligencia de parte de Washington y de su propio gobierno.
La indignación popular estalló después de que la ex secretaria de Educación de Rosselló y otras cinco personas fueron arrestadas por presuntamente canalizar fondos federales hacia contratistas no calificados, pero con conexiones políticas.
Desde el paso de María, cientos de escuelas han estado cerradas para ahorrar dinero y una gran gama de servicios sociales y pensiones están siendo recortados, o están en peligro de que les recorten los fondos.
ilp