El técnico Ignacio Ambriz enfrenta un momento crítico en el Torneo Apertura 2024, y su discurso parece estar agotándose. Durante las conferencias de prensa posteriores a los partidos, Ambriz ha tratado de ofrecer explicaciones sobre los malos resultados que ha tenido Santos Laguna, pero la situación se vuelve cada vez más complicada.
Este domingo, tras la derrota en Tijuana, se le hizo difícil articular una opinión clara sobre lo que su equipo hizo bien o mal en el campo. Sin embargo, a pesar de la adversidad, dejó en claro que no piensa rendirse y que sigue comprometido con el reto de levantar al equipo Albiverde.
"Sabemos que no hemos estado a la altura de lo que significa defender los colores de Santos Laguna. Los resultados han sido extremadamente adversos, pero lo más fácil sería tirar la toalla y decir adiós. Sin embargo, a mí me gustan los retos, me gusta esforzarme para que mi equipo juegue bien al fútbol. Internamente, me siento fortalecido y fuerte, y considero que este es el mayor reto que he tenido en mi carrera como entrenador", expresó con firmeza el estratega, intentando transmitir confianza en un momento en que la presión aumenta.
Ambriz ha sido cuestionado en repetidas ocasiones sobre la defensa de Santos, que ha mostrado debilidades preocupantes, permitiendo goles que podrían haberse evitado con una mayor solidez en la parte de atrás. "Es fácil señalar que la defensa no funcionó, pero creo que el problema comienza mucho antes. Hoy en día, el fútbol se define por pequeños detalles y decisiones que se toman en cada jugada. En el gol en contra, por ejemplo, todo empezó con una jugada ofensiva nuestra que, por una mala decisión, se convirtió en una oportunidad para el rival. Esa jugada pudo haberse detenido con una falta táctica antes de que se convirtiera en un gol, pero no lo hicimos", explicó, intentando desglosar los errores que, en su opinión, han afectado al equipo.
A pesar de las dificultades, Ambriz no pierde de vista que, hacia el final del partido, Santos Laguna tuvo dos oportunidades claras que podrían haber cambiado el resultado. "Es cierto que, sobre el final, tuvimos dos oportunidades que habrían significado el empate, pero cuando las cosas no salen, cuando las derrotas se acumulan, es difícil encontrar palabras para describir lo que está pasando. El equipo, simplemente, no está funcionando como debería", admitió con sinceridad, mostrando su frustración ante la falta de resultados.
Respecto a la expulsión de Santiago Núñez, un incidente que complicó aún más las cosas para Santos, Ambriz optó por no profundizar demasiado en el tema. "No me gusta señalar a un solo jugador. Todos somos responsables de lo que sucede en el campo. Los errores en el fútbol, que yo llamo detalles, están presentes en cada partido. En este momento, no tengo palabras para explicar lo que está ocurriendo. Necesito ver el partido con tranquilidad antes de poder ofrecer una explicación más clara", concluyó el técnico, evidenciando la necesidad de reflexión y análisis profundo para intentar encontrar una solución a la complicada situación del equipo.