Aunque André Pierre Gignac ha sido un jugador fundamental en su paso por los Tigres, el equipo de la UANL no tiene un saldo negativo cuando el atacante francés no ha estado en la cancha.
Por diferentes causas el atacante francés se ha perdido 56 partidos desde que llegó al futbol mexicano en el Apertura 2015.
Contrario a la percepción de que los felinos dependen de Gignac, el saldo para los felinos sin el centro delantero europeo es de 24 juegos ganados, 16 empates y 16 partidos perdidos.
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El club universitario informó que su goleador histórico sufrió un traumatismo en el muslo y en la zona de cadera izquierda, motivo por el que no jugó el sábado pasado en El Volcán contra el Puebla.
“A André-Pierre Gignac se le diagnosticó un traumatismo en el muslo y cadera izquierda. Su reintegración al trabajo grupal queda sujeta a evolución”, expuso Tigres en sus redes sociales.
En el arranque del Apertura 2023, los felinos no dispondrán de dos elementos que contribuyeron de manera importante el semestre anterior en la conquista del octavo título de campeón.
Sebastián Córdova, que fue en lo futbolístico el motor del equipo en la liguilla, padece una lesión de pubalgia, mientras Gignac ha sido el referente en la delantera y uno de los líderes del equipo.
Desde el arribo del delantero francés, los Tigres han buscado contar con jugador que pueda ofrecer contundencia en los encuentros en los que “Dedé” no esté en el campo.
Entre esas alternativas para el eje del ataque han desfilado Julián Quiñones, Ikechukwu Uché, Fernando “El Quesos” Fernández, Héctor Mancilla, Enner Valencia, Ismael Sosa, Jordy Caicedo y Carlos González.
Tras empatar 1-1 en casa contra los Camoteros, el equipo que dirige el técnico Robert Dante Siboldi visitará el próximo fin de semana a los Bravos de Juárez en la fecha dos del torneo.
MN