La sangre que salía de la puerta de una casita de un solo cuarto delató un terrible crimen en el municipio de Cuencamé, Durango.
Vecinos de la calle Guadalupe Victoria vieron el fluido rojo escurriendo en la casa donde vivía solo el señor Valente de 66 años. Ante el temor de que algo hubiera pasado, llamaron a las autoridades.
Era aproximadamente el medio día de este domingo cuando elementos de la Policía Municipal y Cruz Roja arribaron al domicilio.
Por desgracia encontraron una escena espantosa, pues Valente había sido asesinado a machetazos, presentando lesiones graves en varias partes del cuerpo.
El agente del Ministerio Público en turno adscrito a la Fiscalía, acudió a tomar conocimiento de la muerte del hombre, quien se dedicaba a trabajar en el campo y quien no tenía muchas cosas de valor, aunque autoridades de la Policía Investigadora de Delitos consideran que el motivo del crimen pudo ser el robo.