MONTERREY.- La muerte de la pequeña Ana Roberta, quien fue encontrada sin vida en un baldío en Apodaca, ha consternado a toda la ciudadanía y a sus familiares.  

Fue ayer cuando se activó una Alerta Amber, luego de que su madre Ana Karen reportara que le habían arrebatado de sus brazos a la pequeña de 3 años.  

Horas después, encontraron la carriola de la niña en el Arroyo Topo Chico y posteriormente cerca de la zona hallaron el cadáver de la menor en la colonia Praderas de la Enramada.

Cabe mencionar, que la madre de Ana Roberta ha caído en contradicciones en sus declaraciones, por lo que ahora es investigada por las autoridades junto con su pareja sentimental.

De acuerdo a familiares del padrastro, Ana Karen, de 27 años, madre de la menor, tenía una semana y media de vivir en unión libre con Homero, de oficio albañil, de 48, en un domicilio de la colonia Mujeres Ilustres.

Sobrinas de Homero, aseguran que él es inocente y que es una persona tranquila, además de que trataba bien a la niña, incluso que le estaba preparando una fiesta de cumpleaños, la cual ya estaba próxima a realizarse.

“Él nunca fue malo, ella tenía como una semana que se vino a vivir con él, él no tiene corazón para hacer eso, ya iba a cumplir años la niña y le iba a hacer una fiesta, todo le compraba a la niña”, dijo una de las sobrinas.

Por otra parte, la madre de Ana Karen, señala que su hija era agresiva y que recientemente a ella la golpeó.

Asimismo, mencionó que hace unos meses, la pequeña presentaba una fractura en una de sus piernas, por lo que requirió yeso, el cual fue retirado por la mujer antes de que fuera indicado por algún médico.

Mientras tanto las autoridades continúan con las investigaciones para esclarecer el caso.

mvls