Torreón, Coah.- Con un profundo dolor y lágrimas, este lunes, familiares, amigos y alumnos, le dieron el último adiós a la maestra Juana Mireya Fernández, quien fue asesinada el pasado domingo mientras se encontraba en la Alameda Zaragoza en Torreón para participar en el desfile de la Revolución.
Desde temprano, conocidos y docentes llegaron a la iglesia para acompañar en su morada final a la maestra Mireya, para Alejandra Palacios, quien fue alumna, la recordará como una gran amiga pues siempre fue servicial y una buena persona.
Entre cantos de melancolía, los llantos invadieron a quienes conocieron de cerca a la gran persona y maestra.
En todo momento, familiares de Mireya le guardaron honores al permanecer cerca del féretro durante la santa misa.
Minutos después de las 12 del mediodía, el cuerpo partió rumba al panteón donde entre arreglos florales y llantos de la familia le dieron el último adiós.