Guadalajara.- La ejecución de tres botonazos por la alta incidencia de casos del COVID-19 en Jalisco consiguió ausentar a la mitad de compradores y un tercio de comerciantes que solían colocarse cada domingo en el Tianguis del Sol ubicado en Zapopan.
Comerciantes de varios giros señalaron que la clientela ahora ya está alertada y preocupada por la enfermedad del coronavirus -pues los pocos que asisten- priorizan el dinero en insumos indispensables para el hogar.
Los vendedores mayormente afectados son quienes dedican más de 8 horas a la venta de ropa y accesorios “de marca”, perfumería y bolsos, rubro que por ahora queda en segundo término para los clientes.
Maricela, oferta fragancias originales para dama y caballero de las cuales sus ganancias compartió- están por los suelos.
Apuntó que ni siquiera es redituable ir a vender ya que se gasta más en gasolina y comidas.
El impacto también se percibió en los puestos de alimentos, como quesadillas Roger, uno de los más demandantes por la gente.
Refirió que los comensales que asisten lo hacen solos o acompañados con otra persona, o bien, ordenan para llevar.
Por lo contrario, donde se observó un poco más de afluencia de personas fue en las áreas comunes de ropa de segunda.
Sin embargo, pese a los filtros sanitarios instalados en los ingresos al tianguis, hubo gente que desacató las medidas y llevó a sus niños de compras.