ESPECIAL. - La contingencia sanitaria por el Covid-19 provocó que los ingresos en los hogares disminuyeran un 5.8 por ciento y el gasto en la educación cayera un 44 por ciento durante el 2020.
Esta información fue dada a conocer por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía a través de su encuesta Nacional de Ingresos y Gastos del Hogar, publicada este 29 de julio.
Dentro de los resultados se establece que durante el año pasado el promedio de ingresos trimestrales fue de 50 309 pesos, en tanto en el 2018 fue de 53 418, lo que representa un 5.8 por ciento menos.
Además, se informa que el 63.8 por ciento de los ingresos provienen del trabajo, al recibir un promedio de 32 mil 106 pesos de manera trimestral, pero a comparación de hace dos años la fuente de empleo disminuyó pues anteriormente el 67.3 por ciento de las percepciones provenían de este rubro.
El Inegi expone que el cierre de actividades económicas y el confinamiento por la contingencia sanitaria son algunos de los factores por lo que la economía familiar se vio afectada.
La encuesta también expuso que la brecha salarial se mantuvo entre el hombre y la mujer, ya que durante el 2020 el promedio de ingreso de los hombres es de es de 22 618 pesos mientras que en las mujeres es de 14 mil 860.
A lo largo del escrito se plantean los principales gastos de las familias mexicanas.
Por trimestre, la población invirtió 29 mil 910 pesos en el gasto corriente, de los cuales 11 mil 380 se fueron en alimentos, bebidas y tabaco; el segundo gasto más fuerte fue el transporte, ya que invirtieron en el trimestre 5 mil 552 pesos, pero gracias al Home Office, el pago en traslados cayó un 18.9 por ciento en comparación del 2018.
Uno de los rubros que sufrió cambios muy significativos fue la educación, pues la suspensión de clases presenciales permitió que las familias invirtieran 44.8 por ciento menos en pago de uniformes y cuotas escolares, ya que en el 2020 el promedio de inversión por trimestre fue de dos mil 297 pesos mientras que en el 2018 gastaban 4 mil 158 pesos.
Otro cambio significativo durante la contingencia fue la inversión en salud ya que creció un 40.5 por ciento en comparación de hace dos años cuando los ciudadanos invirtieron 901 pesos mientras que el año pasado gastaron mil 266.
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